La línea de pensamiento de finales del siglo XIX dio origen a un sistema de organización social fundado en la psicología de las masas. Traducido al cristiano: un sistema totalitario basado en la reducción de valor del Ser Personalizado, el Hombre con vida en sí mismo, a la categoría de cabeza de ganado, individuo de inteligencia no-activada contra la manipulación de su mente, tal cual si su cerebro se tratase de un campo Propiedad del Estado.

Las Guerras Mundiales del Siglo XX, desde el origen de todos y cada uno de ellos, tuvieron por arma todopoderosa sistemas ideológicos convocados a enfrentarse a muerte. Los presupuestos políticos desde los que crecieron las ideologías fratricidas que en los campos de las guerras mundiales dirimieron su suerte tuvieron sus fuentes en corrientes psicológicas específicamente diferenciadas; pero el horizonte que cada una contempló fue el mismo, la victoria: el control de la disolución del Hombre Personalizado en el seno de los ganados humanos Propiedad del Estado.

Esclavizar al individuo-masa al muro de un sistema de percepción de una Realidad Universal creada con el único fin de convertirlo en el receptor de una Propaganda articulada desde Ideas Generales Inconfundibles, no fue nunca algo nuevo; todas las religiones antiguas y medievales basaron su permanencia en el Tiempo sobre la línea de producción en masa del Prototipo diseñado en sus libros sagrados. La novedad vivida por el Siglo XX fue la proyección de ese sistema a la Ciencia Política.

Aquí, en la Europa de raices católicas, la Idea de la Felicidad del Hombre, más allá de las distorsiones históricas por las que la Idea del crecimiento del Pensamiento hacia una Inteligencia Universal se vio siglo tras siglo enfrentada a los Intereses Individuales de las clases aristocráticas, buscó siempre dar a luz una Civilización basada en el valor divino del Ser Humano, cuya Personalidad tiene en Jesucristo, Hijo de Dios, su Prototipo.

La Columna Madre sobre la que se basa este Prototipo es la Inteligencia Natural propia al Creador del Universo y del Hombre, Inteligencia activada desde nuestra Creación para recrear en el Espejo de nuestro Pensamiento la verdadera estructura de la Realidad Universal desde la plataforma de la Historia. Desde esta plataforma histórica la concepción del Hombre Sapiens Cristianense nos implica a todos en el campo del crecimiento de una Sabiduría que abarque en sus ramas todas las ciencias; en este movimiento de crecimiento desde un estado de ignorancia hacia un horizonte de sabiduría, siempre en las dimensiones del firmamento de la Omnsciencia Creadora Divina, la Ciencia Política, por la extensión de sus leyes a las naciones, es de importancia vital.

Aquí cabe plantearse, visto lo visto en el dia a día de nuestro Siglo, lo que cada individuo y cada ente jurídico entienda por Ciencia Política. Para unos es un arma de conquista del Poder; para otros es una palanca hacia la obtención de riquezas en el menor tiempo posible con el mayor beneficio. La ley de conducta de cada ente jurídico y ser físico una vez desterrado de su núcleo duro de inteligencia social el Código Natural de Comportamiento, el Decálogo Divino por excelencia: No matar, no robar, no dar falso testimonio, no adulterar, honrar a los padres, no envidiar, adorar a Dios, cuyo resumen lo hizo nuestro Maestro y Fundador de la Civilización Mundial al servicio de todos, Jesucristo, "ama a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a tí mismo", lo que entre nosotros aquivale a: "No quieras para los demás lo que no quieres para ti mismo"... Así pues, una vez demonizado el Decálogo, por Judío, sobre cuya Roca la Civilización Cristiana levantó sus pilares, cada cual se forja su propio decálogo, desde el que justificar crímenes, robos, adulterios y el odio hacia todo el que se oponga a la ley por la que ha decidido conducir su vida. Si viendo lo que se ve aún se pregunta alguien porqué el mundo está como está, aconsejarle que regrese a la escuela y recomience el cutivo de su pensamiento desde un nivel de inocencia pura, pero defendido por la experiencia de una larga vida, no es burlarse de su inteligencia. Más aun, la Sociedad del Futuro debe abrirse a la dimensión de este regreso de reaggiornamiento a las ciencias y tecnologías, de las que se está alienado durante las décadas que se está participando en la labor universal de mantenimiento de la Familia y la Sociedad.

Se entiende que en un Estado, el actual, principios del Siglo XXI, aun esclavizado al Estado Medieval y sus leyes de división en clases sciales, donde el trabajo por la supervivencia aliena al ser humano del movimiento de la Inteligencia Universal, la alegría del Conocimiento por el conocimiento (que no lo es tal, pues el legado de las décadas siempre pasa del abuelo al nieto, el padre demasiado ocupado en llevar el pan al hijo) el ciudadano pierda esa alegría por el Conocimiento, (amén de ver su salud destrozada por un sistema que vive del sudor de su frente hasta que exprimida esa frente lo arroja a su suerte); y sienta verguenza, y fuerzas escasas, para sentarse en un aula rodeado de jóvenes, observado como un alienígena cuando lo natural fuese que el Estado abra el Sistema de Formación del Ser Humano a eso que llaman la Tercera Edad, sin exámenes, sin presión, el Conocimiento pasando del Tiempo a la Mente sin otro propósito que el de la elevación de la Felicidad que el Conocimiento de la Sabiduria en vivo le aporta al ser humano.

Vemos, porque tenemos ojos, e Inteligencia para analizar la naturaleza del Mal y del Bien, que quien hace el Mal, entendiendo que el Mal es aquel acto que se atiene al interés individual y rechaza analizar el daño que le causa al bien ajeno, de toda la vida el que hace el Mal, y pone su bien personal sobre y contra el bien ajeno, ha necesitado blindar sus actos con armas precisas, si bien distintas conforme los siglos han ido creciendo en las Ciencias de la Destrucción. Acostumbrados a los interminables siglos de la Edad Medieval, engañados por la propaganda de su muerte, y el nacimiento de una Nueva, la cacareada Edad Moderna, seguimos creyendo que lo que caracteriza a la Edad Medieval fue la Guerra a fuego y hierro, y creemos que porque la pólvora y el átomo hicieran obsoletas esas armas hemos dejado atrás las leyes feudales, cuando la refutación de semejante propagada no necesita más palabras de "Dos" Guerras Mundiales.

El Obrero sigue siendo al Empresario de hoy lo que el Siervo de ayer fue al Señor Feudal. Fueron demasiados siglos los que necesitó nuestra Civilización para abolir la Esclavitud contra la que nos alzó Jesucrsto. La Oposición de los reyes dio origen a la Servidumbre; el poder sobre la vida y la muerte sobre el esclavo fue abolido, pero la ley del uso y disfrute de la fuerza vital del siervo feudal no ha sido abolida en la existencia del Obrero. Alienado de las fuerzas que mueve la Historia, el ciudadano al fin de su vida laboral se encuentra ante una sala de espera, la de la muerte.

Una Nueva Edad nace cuando muere otra, pero la Edad Medieval no ha muerto todavía, se puso una nueva vestimenta para engañarnos a todos, se rebautizó a sí misma con el pomposo nombre de Edad Moderna, ¿y qué? Entre las Guerras Europeas de los Treinta Años y las Guerras Mundiales ¿dónde se ve la diferencia? Pólvora y átomo contra fuego y hierro. ¿La forma de matar es lo que diferencia el paso de una Edad a la otra?

Cuando el fin de la existencia laboral abra delante del hombre la Puerta de la Sabiduría entonces hablaremos del Fin de las Edades Medievales, entre las cuales la llamada Edad Moderna será leida en el Futuro como el Epílogo Apocalíptico que estamos viviendo en nuestros días.

Cabe la pregunta si habrá vida al otro lado de este Fin. Son grandes y demasiados los intereses individuales, físicos y jurídicos, aliados, contra natura, bajo el vestido de un nuevo Sistema Global, para mantener vivo el espíritu servil típico del Sistema Social Medieval. Hablaremos de una Nueva Edad cuando el abuelo no sea un cadáver en vida guardando silla en la sala de espera de la muerte; cuando los abuelos sean pozos de sabiduría llenando con el agua de su experiencia y conocimiento el alma de las generaciones de sus hijos entonces hablaremos de esa Nueva Edad hacia la que el Fundador de nuestra Civilización, en nombre de su Dios, nos puso en movimiento.

Miles de años son muchos años para afirmar que las fuerzas creadas por las infinitas guerras vividas no producen en el ser físico y mental de las naciones huellas traumáticas malignas, prejuicios raciales y psicológicos contra los que todos deberíamos alzarnos y curar en bien de todos, pero que otros, quienes adoran el sistema feudal de siervos y señores, fuertes y débiles, ricos y pobres, parias y rajás, intentan mantener sin importarles que ellos puedan perecer en la hoguera en la que nos quieren hacer arder a todos a la salud de la razón que defienden. Hay que recordar el Fin de la Edad Medieval que pudo ser, pero que no fue nunca porque un sembrador maligno alzó en Guerra nación contra nación a la salud de su Razón Protestante Clara.

Dicen que aquel dia nació el Capitalismo. Lo que no se dice es que en aquella locura de quien confundió el fuego del "Celo por la Casa de mi Padre" con el fuego del Odio del Diablo contra la Europa Católica, nació aquella Alemania homicida y suicida que no paró de sembrar guerras hasta que el fuego de su odio la devoró a ella misma.

¡Pelillos a la mar! La nacion que esté limpia de pecado que tire la primera piedra! Curioso por tanto que haya sido España la que se haya agachado para coger la primera piedra contra Israel, de la mano de un Partido cuyos crímenes quiere borrar del libro de la Historia Nacional-

Vivido lo vivido, la Sabiduría por guía, no queriendo llevarle la contraria a nadie, se ve que el descubrimiento de las leyes de todas las ciencias procede de la Experiencia. Teorizar, parir hipotesis que no proceden de la experiencia ni pueden ser articuladas desde la experiencia, es antinatural.

Sí, en efecto, hay cosas que son naturales y hechos que son antinaturales. No llueve para arriba aunque lo quiera el tirano. Ni va a reventar el Sol por mucho que lo jure un astrónomo.

La primera de las leyes de la propaganda antinatural es conocida. Repite una mentira mil veces y acabará siendo creída como una verdad solemne. Sin ir más lejos las universidades han devenido un transmisor replicando infinitas veces un mensaje cuyos fundamentos no tienen ninguna raiz en la naturaleza del universo, y aunque la revolución radioastronómica de finales del Siglo XX haya revelado la naturaleza de castillo en el aire de la Cosmología del Siglo XIX las universidades permanecen en sus razón clara medievalesca, defendiendo que siendo verdad que los burros no vuelan no se puede negar que los burros puedan ser creados.

La Ciencia Política parte de la misma ley, la experienca. El laboratorio desde el que las leyes de la Política en cuanto Ciencia emergen es la Memoria Universal de las Naciones. Alienar el estudio y conocimiento de la Histora de las Naciones y sus civilizaciones del espíritu de inteligencia de las generaciones es un crimen contra la Humanidad. No hay especie alguna que pueda mantenerse en vida cuando el desconocimiento del habitat en el que nace le es prohibido. Y viceversa, una especie que trae sus leyes al habitat de una especie nativa sin integrarse en las leyes de ese habitat acaba produciendo una lucha a muerte entre la especie nativa y la especie invasora cuando ésta no únicamente rechaza la ley del habitat que se abre a su venida sino que además quiere imponer la suya sobre la ley natural del habitat nativo. Tenemos esta ley produciendo genocidios y guerras por todo el mundo antiguo y medieval. La conclusión es firme: La Ley Universal no puede ser abolida por una Ley Particular sin causar la desaparición de la vida causante de dicho enfrentamiento.

También sabemos lo que la Historia nos enseña, que hacer de la Ciencia Política el Arte del Saqueo del Tesoro del Estado implica la Necesidad de la transformación de la Democracia en Dictadura a fin de salir libre de polvo y paja, una vez reducida a huesos la vaca sagrada del Tesoro Público, el violador de la Confianza de la Nación. No haré de Aristóteles llamando a estrado a cada uno y todos los modelos sociales de su tiempo. A quien quiere permanecer en la ignorancia aduciendo que en la ignorancia está la felicidad no se le puede convencer de esta verdad suprema, no hay victoria sin lucha, ni éxito sin esfuerzo continuado. En los brazos de la Sabiduría Jesucristiana es donde reside la Felicidad.

Pero sí es bueno, buenísimo, recordar que la Ciencia y el Arte son dos mundos paralelos, se ven, se tocan, pero no se deben confundir. O lo que es lo mismo, hablando ya en cristiano: Cuando el político acude a las leyes del Arte del ladrón y le da la espalda a la Ciencia de la Administración comienza la Corrupción.

Igualmente observamos que cuando el artista se mete a científico nace la ciencia-ficción. Y cuando el científico se mete a teólogo nace el Ateísmo.

El problema letal para la Civilización, en definitiva, comienza cuando el científico confunde Ciencia con Arte, y crea un universo ficticio dotado de leyes propias inventadas para enterrar bajo la losa de un universo sin huesos su fracaso para recrear en su Mente el Verdadero Edificio Astrofísico creado por nuestro Dios. En el interior de esta burbuja toda ley es posible, y el Poder se convierte en un trofeo expuesto a la conquista de quien sepa hacer de la Mentira su Caballo de Batalla.

A diferencia del Hombre Sapiens Cristianense, para quien el Fin determina la naturaleza de los Medios, tal cual el Fundador de la Ideología Social del Cristianismo mostró con su Ejemplo, el resto de los sistemas sociales sobre cuyos fines fueron activadas las guerras mundiales basaron su fuerza en la renuncia a la igualdad de naturaleza entre el Fin y los Medios. Renuncia que permaneció activa durante las edades feudales, se alzó hasta las alturas de lo insoportable en el Absolutismo, tuvo su pausa en el sueño de la Revolución Francesa y regresó al tablero de las guerras de los imperios en pleno Siglo XX.

El Hombre como Fin en sí mismo, la realización de cuyo Ser es la piedra en la que se labra la Libertad de la Inteligencia delante de su Creador, devino una quimera a los pies del Comunismo y del Nacional-Socialismo. Al principio del siglo XX el hombre devino un medio, una palanca, un voto, un número, una cabeza de ganado sobre la que lanzarse a la conquista del Poder Totalitario.

La Ideología Cristianense de ser el Hombre el Fin en sí mismo de la Vida en la Tierra fue demolida por la Ideología Política del Obrero en cuanto un peón en el tablero de los Partidos Políticos en lucha abierta por el Poder.

La cosmovisión del ateísmo científico, dividió al mundo en dos clases, la del Fuerte y la del Débil, en su forma moderna: el Pobre y el Rico. El Ateísmo Científico vendió al hombre a los lobos alfa de la jungla homicida en la que la Gran Apostasía de la Razón transformó el mundo. Dicho esto, abrimos la puerta.

II

"YO NO HE VENIDO A TRAER PAZ A LA TIERRA, SINO ESPADA"

Muchos hombres siguen escandalizándose de estas palabras del Hijo de Dios. Y se entiende. Quien no tiene el Pensamiento de Jesucristo no puede entender que siendo ÉL todo PAZ trayese Espada al mundo.

Pero ¿quién trajo la Guerra a la Tierra?

¿Le debe responder Dios a la Guerra contra su Creación con flores, besos y bendiciones? ¿Nos dejaremos masacrar por el Diablo para demostrar que somos hijos de Dios por ser pacíficos?

La contradicción está servida. Desde antes de su Nacimiento quedó escrito: "Mi Hijo será signo de Contradicción".

De nuevo, "la fe que se corrompe". Y la gran cuestión: ¿qué la corrompe sino la Ignorancia sobre la Razón y Causa por la que Dios nos envió a su Hijo con la Espada de la Justicia en la mano?

Empecemos.

5786 atrás una Guerra a Muerte le fue declarada a Dios en cuanto Legislador. ¡El escándalo se hizo en los Cielos!

Un hijo de Dios, creado, no increado, engendrado en la carne de su mundo, se atrevió a hacer sonar el cuerno de la Guerra sin Cuartel contra la Igualdad de todo Ciudadano ante la Ley; terminando su canción asentando su pie sobre el cadáver de su hermano menor, Adán, el primero de los reyes de la Tierra.

No es necesario explicar cómo al Creador del Universo le afectó que una criatura por Él dotada de vida animada a la imagen y semejanza de su Hijo Jesús se atreviese a firmar con la sangre de su hijo pequeño Adán una Declaración de Guerra a Muerte contra la Ley de la Felicidad Universal; ¿o acaso no reside la Felicidad Social y Personal en la Igualdad de todos ante una Ley Incorruptible, inmarcesibe, inmaculada, investida del espíritu invencible jesucristiano eterno frente en cuya Fortaleza Inexpugnable desde el que se sienta en el trono a quien limpia las calles por las que todos andamos tenemos garantizados la victoria contra quienes se blindan de los efectos de sus delitos y crímenes en nombre de la Democracia, o de la República, o de la Religión?

Jescristo marcó un Antes y un Después en la Historia de la Creación Universal, no ya de la nuestra, sobre lo cual ya he escrito lo que se me ha mostrado en la HISTORIA DIVINA; su Victoria separó, para siempre jamás, Justicia de Corrupción, Paz de Guerra, Verdad de Mentira. Y por esto quienes necesitan la corrupción como el aire, o viven del fruto de la guerra: la sangre y la carne del soldado desconocido, o abominan de la Verdad en cuyo espejo ven sus verdaderos rostros, ésos rostros que nos ocultan a todos detrás de unos mass medias tan podridos como ellos mismos, unos y otros, a veces andando juntos, a veces por separado, desde el Principio del Primer Milenio de nuestra Era Cristiana se levantaron contra Su Doctrina, fuente de los Derechos Divinos del Hombre a la Felicidad.

Consumada la Traición a la Constitución por la Corrupción, Dios comprendió que la Revolución Final que como Padre creyó no necesaria, pedía paso a voces. La Locura que se apoderó de aquella generación de hijos de Dios para quienes la Corrupción es reclamar un status quo de dioses a la imagen y semejaza de Satanás, no debía repetirse jamás. Desde aquél Día al nuestro la Historia Universal ha sido un combate a muerte, sin cuartel, contra una Patología Ontológica que se instaló en las casas de los reyes y arrastró, milenio tras milenio, siglo tras siglo, a las naciones a los campos sangrientos de las interminables guerras que copan los libros de la historia uniuversal.

Yo pregunto: ¿Qué gloria puede haber en una masacre, en una matanza, en una guerra?

Todos conocemos la respuesta: Las bestias necesitan medir fuerzas sobre los cadáveres de pueblos enteros, levantar su Poder sobre el hundimiento en la miseria de las naciones que abrazaron sus promesas.

"Seréis como los dioses" dijo la Serpiente.

"En el Infierno", le respondió el Señor de la Creación.

"Así sea", dijo el Rey de la Plenitud de las naciones.

Ciertamente, pero ¿por qué Dios esperó tanto?

¿Por qué no le aplastó allí mismo y entonces la cabeza al Enemigo de su Ley?

Dios tiene el Poder de resucitar a los muertos. Le hubiese bastado levantar a Adán de la tumba de su Ignorancia, desterrar al Traidor del Edén, arrojarlo al Abismo cubierto por las Tinieblas, al otro lado del Cosmos, y por el Temor a su Infinito Poder mantener el Futuro en el seno de la Ley.

Y sin embargo, alli había un problema vital: "Dios es Amor". El Creador quiere vivir entre sus hijos como Padre, no como Tirano infame. Si amnistiaba al Homicida y Rebelde contra la Unidad de todos los Pueblos de la Creación tarde o temprano la Tragedia volvería a repetirse.

Así que ¿por qué la Ley de la Justicia no debería sobreponerse a la Ley del Amor cuando el Amor a la Ley ha sido desechado?

Amnistiar al Fratricida es bendecir un Nuevo Fratricidio Futuro. Siguiendo por este camino la cadena de guerras civiles entre hermanos levantaría en el Creador el Fuego de su Espíritu, acabando por reducir a polvo todo lo que del polvo ÉL creó.

Dios aceptó la Guerra contra su Ley.

Una Serpiente Homicida, de nombre Satán, retó a Dios a impedirle destruir toda vida en la Tierra. ¡Cómo no iba a traer la Espada de la Victoria Aquel por cuyo Amor fueron creadas todas las cosas! Ciertamente, dos puertas se abrieron ante sus ojos. Jesús podía cruzar la puerta de la Paz con el Traidor; así evitaría su Cruz, el Genocidio contra los cristianos, y bajo su Bandera el Fin del Mundo Antiguo no hubiese derivado en el principio del Mundo Medieval. Satán y Cristo hubiesen regresado a su Mundo y allí Pan y aquí Paz. Pero ¿qué sería del Reino de Dios el Día Después?

La otra puerta que le abrió Dios a su Hijo fue la Abolición de Su Imperio y la Creación de un Reino Universal Único, cuya Corona le sería ceñida por el propio Dios. Rey Universal Sempiterno: Toda Gloria, todo Poder en Sus manos, Cabeza del Estado Divino.

¿Se arrodillaría Dios Hijo ante Dios Padre en presencia de toda la Casa de YAVÉ? ¿Cruz o Amnistía? ¿Espada o Paz? La decisión era Suya. El Futuro de la Creación entera la puso Dios en el verbo de su Jesús.

La respuesta a "La Fe, que se corrompe", no está lejos de nosotros. La Corrupción es efecto de ausencia de Inteligencia a la imagen y semejanza de la del Hijo de Dios. El Sacerdote vive de la Fe, el científico existe por la Razón. Mas el espíritu de Inteligencia es Herencia de Cristo a su Descendencia, nacida de su Esposa, cuyo Día ha estado esperando la creación entera según lo reveló el Espíritu Santo.

Así pues, dejando la controversia para quienes tienen su Prototipo en Satán, y en la mentira su Herencia, sabemos que Dios Hijo dobló sus rodillas ante Dios Padre. Resucitó y regresó a Su Mundo. Ahora bien, quien bajó de su Mundo al nuestro lo hizo, acorde a la Revelación Divina, como rey de reyes y señor de señores, vestido de toda la gloria del Rey que entra en Guerra con su enemigo. ¿De qué Espada habló el Rey cuando dijo: "Vengo a traer Espada"?

De una espada de hierro desde luego que no. De haberlo sido le hubiese declarado la Guerra al Imperio Romano. Todopoderoso, el Verbo su Gloria, Jerusalén se hubiese rendido a sus pies, Roma se hubiese puesto de rodillas ante su Corona, y el nacimiento del Hombre Sapiens Cristianense habría sido salvado de ser arrojado a la arena de las Persecuciones.

La decisión de subir a la Cruz nos descubrió a todos la naturaleza de la Espada que tiene en su Boca: Es la Espada de la Justicia. De aquí la Redención.

El Hombre Sapiens Adanensis se hizo Historia. Desde ese instante vino la gran pregunta: ¿Cuándo esa Espada sería desenvainada y alzada en Guerra abierta contra el Enemigo de su Padre y de su Reino?

Porque sabemos que Dios le dijo al Rey: "Siéntate a mi Diestra hasta que ponga a tus enemigos a tus pies".

Pero sabemos más. Le dio Dios a Cristo una Esposa en la Tierra, y al Fruto de este Matrimonio sempiterno le dio por herencia esta Palabra: "TU Descendencia se apoderará de las puertas de sus enemigos". Y esto, estando aun esta Descendencia en las entrañas de su Santa Madre Apostólica a la manera que estuvo Cristo en las entrañas de la mujer de Abraham. ¿Pudieron la Muerte, el Diablo y el Mundo impedir el Nacimiento del Hijo de Adán, hijo de Dios? He aquí entonces porqué, conociendo el Poder Infito de Dios, escribió el Espíritu Santo sobre la Descendencia de Cristo Jesús:

"La creación entera espera con el corazón en un puño el Día de la gloria de la Libertad de los hijos de Dios".

Ciertamente, porque siendo el Señor Jesús: "Dios Verdadero de Dios verdadero" su Descendencia recibe la gloria de la libertad del Rey, su Padre. Pues es de Su Veracidad que toda criatura recibe su condición divina. Quien es hijo de Dios lo es porque es hermano del Rey, quien es hijo del Rey es hijo de Dios, y todos, los unos como los otros tenemos en su Espíritu la fuente de nuestra existencia, el Rostro que se refleja en el alma de la Creación y nos da vida a su Imagen y Semejanza: Vida Inmortal.

La Conclusión es clara. Cristianos de todas las naciones: Estamos en Guerra, no porque la declarásemos, no porque la buscásemos, sino porque el Derecho a la Vida y el Deber de defenderla es Sagrado. Cristo Jesús murió para que su Descendencia viviese. Anes de nacer nosotros la Guerra ya le fue declarada a nuestro mundo. La realidad final es esta: El Enemigo de Dios y del Hombre mueve sus ejércitos hacia la Destruccion Nuclear de toda vida en la Tierra.

No creáis a quien dice que habrá un Nuevo Orden Global. Satán es el hijo de la Muerte y su Madre tiene un único Fin: Destruir toda vida creada por Dios, su Enemigo.

El Rey está en pie. La Espada de la Victoria está en la Mano del Rey de los Cielos y Señor de la Tierra. La Batalla Final de la Guerra que comenzó hace 5786 años, aproximadamente, ha comenzado y camina a su fin: La Conversión de la Plenitud de las Naciones al Reino de Dios Hijo.

¡Cristianos de toda la Tierra, uníos!

La Guerra contra el Reino del Hijo de Dios en la Tierra no ha cesado jamás. Las Persecuciones y Matanzas contra los Cristianos es una actualidad sangrante a la que la ONU le ha dado la espalda; y los Gobiernos Esclavos de la Agenda 2030 bendicen con su silencio el Terror del Islam contra los pueblos cristianos de Nigeria, Sudán, Congo...

En Africa y Asia 380 millones de cristianos sufren persecución y muerte. El Grito de los inocentes ha llegado al Cielo. El Decreto del Dios Padre: "Que no sea hallado para Satán lugar en la Tierra", vive en el hijo del Rey.

La Espada de la Justicia ha vuelto a ser desenvainada. La Descendencia del Señor ha nacido; el Dia de la gloria de la libertad de los hijos de Dios ha amanecido. ¡Bendito sea YAVÉ DIOS PADRE!

Recordad Su juicio: "Los cobardes, infieles, abominables, homicidas, fornicadores, hechiceros, idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el estanque que arde con fuego y azufre, que es la segunda muerte".

Quien no ama a Dios, que tema por su vida."Porque el Hijo hace lo que ve hacer al Padre", y habiendo juzgado Dios al Mundo Antiguo, el consejo de quien tiene el Espíritu de Inteligencia es que no es expongáis a seguir haciendo el Mal en la creencia que diciendo "Señor, Señor" seréis absueltos de vuestros crímenes.

En el Amor está la Vida, en el Terror está la Muerte. Quien ama el Terror, por el Terror será juzgado, pues cada cual es juzgado por sus actos según la naturaleza de sus actos a los ojos de la Justicia de Dios: Padre e Hijo.

Aquel que odia a su prójimo, por su Odio será juzgado; pues quien no ama aquí en la Tierra a su prójimo ¡cómo lo amará en la vida eterna!

Es abominable a Dios el Odio hacia su Creación, cuanto más el Odio hacia el prójimo.

El Poder es exclusivo del Rey, JESUCRISTO. Todo hombre que vive y mata por el Poder cava su propia condenación. El Gobierno de las naciones ha sido instituido para servir a los Pueblos, jamás para hacer de su institución una palanca hacia la Dictadura.

Toda nación es semejante a una Gran Finca que su Propietario gobierna mediante una Administración. La Corrupción comienza cuando este administrador usa los bienes de su señor para arruinarle y llevarle a la bancarrota, de manera que con el dinero robado, oculto bajo una transparencia negada, expropia a su señor comprándole con su dinero su propiedad.

Es el Buen Dictador, en nombre de los empleados de la Finca se alza como Dueño y Señor. Pero si la Finca ha sido llevada a la ruina ¡cómo levantará a la nación si todo lo que sabe es arruinarla!

El pueblo, el señor de esa finca, cae en el hoyo y pierde lo que le pertenece. ¡Cómo recuperará el Pueblo su Propiedad si se la entregó a un Administrador que le prometió que siendo él el dueño y señor: Pan y Prosperidad!

La estafa cometida, el Delito de Expropiación del Tesoro de la Nación consumado, únicamente la Unidad de todo el Pueblo puede arrastrar a esa Administración ante la Justicia!

O la Paz, bajando la cabeza y arrodillándose ante el Ladrón: o la Espada de la Justicia cayendo sobre las cabezas del Administrador...

Que cada cual decida.

El ladrón que expropió a su señor tiene dos puertas ante sí, abandonar el barco y disfrutar del oro robado en tierra de destierro, o hundir a la nación en Guerra Civil en la esperanza de conquistar el Gobierno del Buen Dictador.

PRIMER DOGMA: PROPAGANDA Y MENTIRA

CRISTO RAUL.ORG

MIS DIARIOS Y ENSAYOS

EL ENDECÁLOGO DEL BUEN DICTADOR

UNA INTRODUCCIÓN AL PENSAMIENTO POLÍTICO DEL HOMBRE SAPIENS CRISTIANENSE

TERCER DOGMA: AMBICIÓN Y COBARDÍA

CUARTO DOGMA: PRINCIPIO DE RELACIÓN ENTRE VOLUNTAD E INTELIGENCIA

QUINTO DOGMA.TRAICIÓN Y ESPERANZA

SEXTO DOGMA: SABIDURÍA Y SANO JUICIO

REFLEXIONES PRIMERAS: PASADO, PRESENTE Y FUTURO. LA GUERRA DE LOS CÓDIGOS

RESUMEN DE LOS SEIS PRIMERAS DOGMAS DEL MENTIROSO

INTRO CRISTIANENSE

MEMORIA UNIVERSAL JESUCRISTIANA

I

II

"YO NO HE VENIDO A TRAER PAZ A LA TIERRA, SINO ESPADA"