LA CREACIÓN DEL UNIVERSO SEGÚN EL GÉNESIS |
PRIMERA PARTE CREACION DE LA LUZ DEL GÉNESIS
FUSIÓN DE LA
CORTEZA
44. Vemos pues, que tomando de lo que se ve lo que se
deduce, tal cual la inercia por sí misma propone, que partiendo
de lo que se tiene las consecuencias a las que conducen los hechos
no admite incongruencias, si bien es cierto que el que tiene no
suele valorar lo que otro pierde; es siguiendo esta línea de pensamiento
que la respuesta de orden físico al enigma bíblico pone en movimiento
una serie geofísica cuyas principales estaciones de recorrido son:
1º-Fusión de la Corteza Primaria y 2º-Sublimación de la Proto-Atmósfera
resultante.
45. El motor de esta serie geohistórica fue el Núcleo. La energía necesaria para provocar este cambio de estado la produjo Dios mediante la aceleración del ritmo de trabajo del Núcleo; aceleración revolucionaria efecto de la elevación de la Densidad Gravitatoria por Unidad Cúbica Astrofísica del Campo Gravitatorio Terrestre. En términos prácticos, comparando ahora el Cuerpo Geofísico con una Máquina, digamos que Dios llenó el tanque (Campo Terrestre) de energía (Gravedad), ocasionando de esta manera la elevación automática de los parámetros del Motor Geonuclear al Punto Crítico de Implosión Astrofísica. (El hecho de que este Punto Crítico no fuera rebasado se ve por los efectos causantes de la Sublimación de la Proto-Atmósfera, a su vez origen de los casquetes polares, sin los cuales el Sistema Biosférico no hubiese nacido, y cuya desaparición presupone su caída irrecuperable). Así pues, una vez que la Corteza Primaria se hubo transformado en
un mar de lava viva, abarcando sus costas de un polo al otro polo
del Globo, y la Proto-Atmósfera (Primigenia) levantó su cuerpo hasta
el techo del Planeta, el cuerpo geonuclear comenzó a ralentizar su número de revoluciones
por unidad geológica de tiempo.
46. Era ya el Mediodía cuando los gases producidos por la fusión cortesaria se habían acumulado alrededor del Globo y dado origen a una Atmósfera Planetaria, primitiva, pero que contenía en su volumen todos los elementos necesarios para dar a luz a nuestra Biosfera. Aquella Atmósfera siguió creciendo durante toda la Mañana y con el paso de las Horas empezó a ocultar bajo su volumen enrarecido el mar de magma que le diera origen. (Siempre hablando a grandes rasgos, grosso modo, en líneas generales,
concentrando la atención en el todo en preferencia a los detalles.
Estas cosas pasaron durante la Mañana del Día Primero. Todavía quedaba
una Tarde por delante).
47. Teniendo en cuenta la mecánica de la fusión de los
sólidos, una lección para parvulitos que se suele dar en todas las
clases desde tiempos muy antiguos, y que nos ahorraremos su meollo,
obviando el conocimiento íntimo de las estructuras cristalinas y
la manipulación a que se presta desde la química como desde la física,
y entendiendo que esta mecánica elemental fue la que Dios le aplicó
a la Corteza Primaria de la Tierra, podemos afirmar sin miedo a
una caída en el absolutismo de la todopoderosa razón de la ciencia,
y menos aún en la trampa nobelesca de la dogmática de la Academia, que la estabilización dinámica del
edificio geofísico externo de aquella Tierra Primaria surgió como
consecuencia del decrecimiento de la actividad sismológica de su
cuerpo interno. Digamos que la Fuerza que empleó Dios para jugar
con la Tierra como si se tratase de una batería de volcanes con
la que componer una sinfonía única, espectacular, maravillosa y
alucinante, y después de haberle sacado chispas y truenos a los
platillos, bien porque se hubiera cansado y no pudiera más, bien
porque destrozó las baquetas, el hecho es que la Fuerza cayó, y
se hizo el silencio. Traducido al cristiano:
48. Siguiendo la ley de la inercia, la energía causante
de la fusión de la Corteza Primaria una vez cumplido su trabajo,
regresó al estado de equilibrio anterior al momento de abrir Dios
su boca y dar a conocer su Palabra: “Haya luz”. De manera que según
el silencio se fue haciendo más espeso, hasta igualar la espesura
de la Atmósfera Primaria así creada, el color rojo y amarillento
volcánico de la Corteza Primaria empezó a difuminarse, a caer, y
a adquirir el color de la materia sólida volcánica. Y así al entrar
en la recta de la Tarde del Primer Día del Génesis, la Tierra comenzó
a regresar a su estado natural de equilibrio entre las diferentes
partes que componen su cuerpo geofísico.
49. La estación terminal de este proceso (creación de la Atmósfera Primigenia mediante) era la Sublimación de esa Proto-Atmósfera cuya composición química primaria podemos compararla a la de los planetas “gaseosos” cuya evolución no fue sometida a este acontecimiento especial, si bien no olvidando la fenomenología única a que Dios sometió la formación de la Corteza Primaria de la Tierra, asunto que se tocará cuando le toque y le convenga al ritmo de esta Introducción. Por lo tanto, y siguiendo, una vez aislada la Tierra de una fuente
de energía externa con la que entablar un chat de energía, por introducir
caracteres diarios en el tema, el Núcleo de la Tierra, a raíz de
la transformación del campo gravitatorio en fuerzas mecánicas, el
Núcleo entró en una peligrosa recta de colapso astrofísico (asunto
éste que se tocará igualmente cuando convenga y venga a cuento.
Lo importante son los hechos, y el hecho fue que:) Durante el recorrido
del “estado de fusión masiva” al “estado de equilibrio geofísico”
se solidificó la Corteza de la Tierra y la Proto-Atmósfera, como
resultado, entró en una fase de Sublimación Súbita.
50. Al caer la Noche del Primer Día, sin ir más lejos,
la Proto-Atmósfera se había transformado en un Manto de Hielo. Manto
de Hielo que cubrió la Tierra de polo norte a polo sur, y es la
Luz de la que habla el Génesis. Grosso modo: del Fuego al Hielo.
CAPÍTULO 6
CREACIÓN DE
LA ATMÓSFERA PRIMIGENIA
|
LA CREACIÓN DEL UNIVERSO SEGÚN EL GÉNESIS |