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CAPÍTULO
DUODÉCIMO
EL
RETO DEL SIGLO XXI
Como ya
vengo diciendo el Futuro es nuestro, pero el Mañana es de Dios, y en este
orden, dejando la especulación sobre a quién le pertenece el Mañana, pues
¿quién sabe cómo será el mundo en el siglo XXV?, pero siendo propio del Ser
moverse en el Tiempo, y asumiendo estos límites por los que las fuerzas del
Individuo se centran en la esfera de su dimensión social, donde su Futuro
se realiza y lo llama a la acción, y tomando esta consciencia como punto de
arranque, digamos que la Crisis Mundial, que es crisis de Civilización, tiene
su etiología en una relación antinatural entre el Estado y el Hombre.
De haberse
producido la relación Estado-Hombre dentro de una Estructura Ontológica dos
serían los fundamentos de la realidad a estas alturas de la Historia.
Dos son los
Momentos decisivos en la existencia del Ser. Uno es cuando el Ser se encuentra
fuerte, en todos los sentidos, es decir, cuando uno asume su Conciencia como
Hombre, que tiene lugar, en unos un poco antes, en otros un poco después, pero
siempre dentro de la franja entre los 18 y los 25 años de edad. A este Hombre,
individualizado, lleno de energía creativa, espíritu social, y voluntad de
participación activa en el seno del mundo, se le debe el acceso libre a los
medios necesarios para la realización de su proyecto como Ser.
Traducido a
los términos corrientes digamos que al alcanzar este punto donde el Ser, por
inercia, se vuelca en el Mundo para disfrutarlo formando parte de su actividad,
la Sociedad tiene el deber de poner en sus manos una cantidad –tomando como
referencia el lugar donde me encuentro y en relación a su poder adquisitivo- de
unos 100.000 Euros, punto de partida que es de aspiración motriz durante, y de
proyección participativa después, en cuanto la insuficiencia propone la
colaboración en grupo en orden a la creación de un proyecto, espíritu
participativo que viene fundado en la Naturaleza y se desarrolla en toda su
Potencia durante el Trayecto de Aspiración.
Esta
ausencia de relación Creadora entre el Estado y el Ser es uno de los pilares
que están haciendo temblar la Civilización, y que de no proceder a su
corrección acabará finalmente por hundirla.
El otro
punto básico que está haciendo que se tambalee todo el edificio de la
Civilización está en el otro extremo de ese Periodo Ontológico en el que la
Fuerza Creativa del Ser en su Juventud da paso y se transforma en la Energía
Creadora de la Sabiduría que procede de la Experiencia de muchas décadas en la
Vida.
Si el Estado
y las fuerzas de asalto contra el Ser que el Estado Moderno puso, y vemos, en
movimiento, tuvo su estrategia de acción en la transformación de la Juventud en
un producto de Consumo, y la acción estatal respecto a este estado Ontológico
es la que le corresponde al del pañuelo que se usa y se tira, Crimen contra el
Ser que la Modernidad “Progre” de Izquierdas fundó en la naturaleza del propio
Progreso; no porque las derechas no lo hicieran a su manera, pero lo que hace
más detestable un crimen es que se pretenda legalizarlo en una necesidad
natural.
Pero
abandonando el vómito a quien venga de esas orgías donde los Estados se
sirven – a la cuenta del contribuyente-votante- un menú de hasta 18 platos
mientras una tercera parte de la Humanidad se muere de hambre, y porque las
orgías conllevan al vómito como método de perpetuar la buena mesa, nosotros
vamos al grano, que, aunque transgénico y nos chute una bacteria
durmiente, sólo ellos saben el efecto patológico sobre nuestras venas cuando
esa bacteria se despierte- y porque estamos aún frescos y vivos, tenemos
el don más grande que existe, el Poder del Pensamiento, un Poder contra el cual
los Estados Modernos, de Izquierdas o de Derechas, monta tanto, tanto monta, se
han inventado la Globalización como Medio de Represión, y contra cuya Fuerzas
la Civilización ha creado una Nueva Plataforma de Comunicación, que es donde
precisamente nos encontramos.
Es
sirviéndonos de ésta y porque nos servimos de ella que los Estados tienden
ineludiblemente –como se está viendo en la rabiante actualidad que nos acecha– a Legislar nuestra Presencia, movimiento represor
que es apoyado públicamente por las Sociedades de Autores en base a sus
intereses, que, aunque no coinciden con los del Estado, necesita del Legislador
para seguir manteniendo su Invento de Impuesto Revolucionario Universal en
activo. Y así, uniéndose el hambre de Riquezas a la sed de Poder, estamos asistiendo
a la represión contra el Pensamiento en nombre de ... no sabemos cómo pueda
llamarse de otra manera a la represión. Es de imaginar que el Genial dúo
dinámico Sarkozy-Brown conoce esa otra palabra mágica y de aquí el Estado
Represor contra la Plataforma P2P que promueven, defienden y quieren imponer
con todo el Poder del Modelo de Civilización que llevan en sus cabezas –(¿pero
tienen algún modelo?). Pero regresemos al Ser.
El segundo
Fundamento de un Edificio Social con Aspiración de crecimiento sano y alegre,
dinámico y fructífero, tiene en la Sabiduría que procede de la experiencia
su columna vertebral. El Estado Moderno tiene por función exprimir al
hombre, chuparle la sangre, y cuando ya no le queda fuerzas: arrojarlo al
basurero. Pero es de cajón que sin Juventud No hay Estado, ni
Civilización, ni nada que se le parezca.
De manera
que en un Nuevo Modelo de Relación Estado-Hombre, donde la Realización del Ser
es su Meta, al implicar su Consumación, es ahí donde la Civilización lo espera
para introducirlo en su Nuevo Periodo Ontológico, la Madurez, Periodo al
que unos llegan antes y otros después, en función de su propia Individualidad.
Puesto que sin Juventud no existe Mundo, y porque la Juventud es la Fuerza del
Mundo, es sólo natural que una vez ofrecida esa Fuerza la Civilización responda
poniendo a los pies y en las manos del Ser todos sus beneficios.
Traducido
esto al momento actual digamos que a estas alturas la Sociedad hubiera debido
estar articulada para volver a encontrarse con el Ser, al que financiara en la
flor de su Juventud, y al que vuelve mirando ahora no a su Fuerza, sino a su
Sabiduría. Es ese momento en el que se produce la entrada en la Tercera
Edad, que la Civilización debiera poner en las manos del Ser una nueva
cantidad, multiplicada por las décadas, promoviendo de esta manera no la
retirada del Ser de la Actividad sino su integración en la Civilización desde
una nueva perspectiva.
En números
reales digamos que es solo de Justicia que al término del Periodo Activo, y al
principio del Periodo Pasivo, la Familia, entendida como la Pareja Creadora de
Juventud del Futuro, ya Presente, reciba de la Sociedad una cantidad decisiva,
para que en su experiencia la administre acorde a la Sabiduría: para el
disfrute del Ser en el Espacio y del Fruto de su Carne y Sangre en el Tiempo.
Ahora
ponedle vosotros un número: 100.000 Euros por Familia, es el mío; en caso de
separación de la Unidad, mitad para él y mitad para ella.
Observemos,
en consecuencia, que al haber tenido el Estado en la Juventud un Producto de
Consumo y de extracción de Fuerza sin compensación de ninguna clase, excepto el
aparcadero en una Tercera Edad privada de todo disfrute de su experiencia y
Sabiduría, y enajenada del Cultivo de su Sangre en el Tiempo por impotencia de
medios, y lo mismo la Democracia que la Dictadura tienden a imponer esta
Sociedad contra el desarrollo y Madurez del Ser como Manifestación Suprema de
la Creación, era sólo lógico que más tarde o menos temprano un Mundo basado en
semejante Fundamentos emprendiese una cuesta abajo sin retorno.
Pero digamos
que el Mundo ha entrado en esta Fase Final no por voluntad propia. No seamos
tan ineptos como las Izquierdas para hacer culpable del estado de miseria en
que se encuentra el mundo a las fuerzas del Capitalismo, ni seamos tan
ridículamente payasos para culpar de la crisis del Capitalismo a las fuerzas
rebeldes contra sus leyes depredadoras. Observamos que lo mismo los sistemas de
izquierdas que los de derechas tienden indefectiblemente a la perpetuación
del Estado como Ente Supremo de Regulación del Pensamiento y Subordinación del
Ser al sistema animal de conversión del Hombre en una bestia productora de la
sangre que el Poder requiere para mantenerse “forever young”.
Obviamente
doy por descontado que nadie creerá que una Sociedad pueda fundarse sobre
Periodos Ontológicos, y asumo que el Poder tiene en esta Incredulidad, para dar
lugar al Nacimiento y Creación de una Civilización fundada sobre el Ser, su
Arma letal. Pero este Siglo dirá si la Posibilidad se hizo real o devino un
pensamiento sin futuro. En cuanto a lo que vemos, la ausencia de esta
Arquitectura ha sido el caldo de cultivo donde la locura, la violencia, la
dictadura, el imperio y la corrupción alimentadora de las infinitas guerras que
hemos vivido, en cuanto Humanidad, encontró su criadero.
Nadie tiene
la culpa, y el que la tuvo ya fue redimido, así que lo que nos queda es la
Acción. Pensar la Posibilidad de la Articulación de una Sociedad Mundial basada
en estos Periodos Ontológicos tal que las Columnas de todo el Edificio, creer
en el Poder del Hombre para hacer posible esta Evolución Trascendente y
Decisiva de su Civilización, es dar el Primer Paso hacia su
Construcción. Y sobre la marcha ya iremos viendo cómo vamos solucionando
los problemas que han de salirnos al paso, especialmente si no olvidamos que
estamos caminando al filo del precipicio.
Cuando se
anda lo más importante es saber hacia dónde. Y como andando se hace el camino,
y para tener problemas sólo hay que estar vivos, no hay que tenerle miedo a los
problemas, sino echarse a andar con el futuro entre ceja y ceja. Y Dios ya dará
respuesta a cada caso.
En cuanto a
la que nos preocupa observemos que la estructura del Ser sobre la que se basó
el Estado Moderno tuvo en un Modelo Animal del Hombre su prototipo, y que,
superado una vez, y en vía de superación final ya, extendiéndose el periodo de
existencia del Ser de la media de medio siglo al siglo, y buscando la
realización de los 120 años naturales propuesto por Dios, todo el Sistema de
Relaciones Humanas debe transformarse con objeto de articular el Estado y la
Sociedad acorde a esta Nueva Dimensión que nos espera al otro lado del Salto
Evolutivo que estamos a punto de dar, si no voluntariamente sí, al menos,
provocado a la fuerza por la situación mundial en que nos encontramos.
Una cosa es
conceptuar la Existencia tomando la vida media del hombre moderno: medio siglo,
y otra muy diferente partir de un Ser cuya vida media natural es un Siglo. Es
todo el Edificio el que debemos transformar con objeto de que la existencia de
la Civilización prosiga sobre Fundamentos Ontológicos.
Esto
implica, obviamente, una reconceptuación de los
Periodos Ontológicos Humanos en el seno de una Sociedad cuyo Modelo de
Individuo estaría basado en una vida media de Siglo por cabeza, y que, por
tanto, Infancia, Pubertad, Adolescencia, Juventud y Madurez rompen los límites
hasta ahora fundamentales y alrededor de los cuales el Estado Moderno
estableció su Regulación, y cuya permanencia subjetiva se mantiene en base a la
constante masacre a que está expuesta la Humanidad bajo el peso de las
enfermedades incurables, las pan-epidemias regulares, los Genocidios tribales y
las Guerras de bolsillo con las que el Poder alimenta a su querida, los Media.
Es porque el
Estado Moderno, democrático o dictatorial, de izquierdas o de derechas es lo
mismo, no puede concebir la existencia de un Hombre dotado de una Vida Media
Natural de un Siglo, que su Sistema se hunde y produce la Guerra como medio de
liberación de la insoportable masa humana para el mantenimiento de la cual no
tiene fuerzas, tal como se hiciera en las Guerras Mundiales, cuya orgía liberó
al Estado Moderno del peso que hundía sus sistemas, acabó finalmente por hundir
al Imperio de la Unión Soviética y ahora hace que se tambalee el Imperio de los
Estados Unidos de América.
Este Estado
Moderno, incapaz de sostener una Sociedad libre de Enfermedades, de Locura, de
Criminalidad y de Suicidio, es , sin quererlo, pero por inercia, el que tiende
a la perpetuación de la Guerra como Medio de Liberación de sus fuerzas, y
promueve la Impotencia de las energías de la Civilización a fin de perpetuar
el status quo de las Familias Salvajes que se han repartido el Poder
y aspiran al Control de todos los Medios de Nutrición y Producción del Mundo.
Incapaz el Poder Moderno de concebir una Sociedad Humana Libre de Enfermedades
tiene que promover la Enfermedad a la vez que proceder a una cura, eliminando
en el proceso una gran masa humana.
Verdad
rotunda y tremenda que vemos en la Asociación Estado-Tabaco, donde si por un
lado se busca la cura del Cáncer y las enfermedades asociadas al tabaco, por
otro se promueve el Cáncer mediante su Monopolio sobre la Tabacalera y la
Libertad de los Productores para poner en circulación un producto que atenta
malignamente contra la Salud.
El mismo
elemento de Asociación Criminal lo encontramos en la legislación sobre el
Alcohol, un producto altamente tóxico que atenta contra la salud mental del ser
humano y su relación familiar y social, pero que es promovido por el Estado
Moderno a fin de mediante sus consecuencias eliminar esa masa humana cuyo
crecimiento hundiría el sistema sobre el que basa su Poder.
El Delirium
Tremens del fracaso del Estado Moderno es la necesidad de la Guerra como medida
final a que es conducido por su impotencia para transformarse y su incapacidad
para dar vía libre a un Modelo Humano cuya Vida Media es de un Siglo.
El reto, por
tanto que tenemos por delante y en cuya plataforma se jugará la Civilización su
Futuro en este Siglo XXI, es, como decía el poeta, de Ser o no Ser.
LEY
DE PROCREACION DEL SIGLO XXI
El Origen de
la Ley es la promoción del Bien y la erradicación del Mal. La sujeción de la
Ley a intereses individuales, partidistas y corporativistas, neutralizadoras de
su Origen, es en sí Delito; al aminorarse la potencia de la Ley para mantener
el Bien en crecimiento constante y continuo, la Ley “esclavizada” activa las
fuerzas contra las que la Ley existe, siendo el efecto de esta perversión
abominable el crecimiento del Crimen a nivel de Organizaciones, ya políticas,
industriales, o mafiosas, de donde procede la Ciencia de la Ingeniería
Financiera al servicio del Tráfico de Personas, Drogas y Armas. Sin embargo el
Fin del Mal es la perversión abominable de la Ley, cuyo estado supremo de
Maldad alcanza su cénit en la adopción por la Justicia y Civilización, bajo un
Estado gobernado por el Delito, como el estado natural de la Sociedad Política,
de donde la Crisis Global de este principio de Siglo y Milenio. Habiendo la
Sociedad Política “esclavizado” la Ley a los intereses partidistas, de un
sitio, y corporativistas, del otro, el cuadro fenomenológico que se nos
presenta en vivo no sorprende tanto por la Crisis Global, que es su efecto
natural, al igual que lo es la sangre al crimen, cuanto que la Guerra Nuclear
aún no haya entrado en juego; fenómeno singular que sorprende al observador por
en cuanto pone ante sus ojos el grado de Control que el Delito ha alcanzado
sobre sus propias fuerzas; y sin embargo no es menos cierto que este Control se
ha realizado sobre las espaldas de los Pueblos. Puesto que sin sacrificar nada
de sus Privilegios la Sociedad Política ha cargado a la cuenta del Ciudadano
todos los efectos inherentes a sus “defectos”, por llamarlos de una forma más
“política” una vez que la Política ha quedado definida por sus actos como el
Delito que es juzgado como “defecto de Clase”.
LEY
SISTEMÁTICA
Los Estados
habilitarán a las clínicas de maternidad, privadas y públicas, con el Poder de
Realización del Test Genético de Paternidad, como Deber del Estado, el Original
de cuyo Resultado pasará al Registro Genético Nacional creado al caso, siéndole
entregadas sendas copias al hombre y a la mujer competentes en el Acto
Procreador, quedando el Original al servicio del Procreado en relación a
cualquier ruptura de sus Derechos sobre su Procreador que pudiera surgirle en
el futuro, bien sobre su parte en los bienes de su Procreador mientras éste
está vivo como sobre su testamento una vez difunto.
El Derecho
del Procreado sobre el Procreador es inalienable y por él el Procreado puede
invocar a la Justicia en su ayuda, caso de ruptura de sus Derechos, procedente
de cambios familiares, contra su Procreador, en vida, y contra su testamento,
cuando difunto.
La negación
por parte del Procreador al Procreado a la asistencia física y mental que le
debe el Procreador al Procreado por Derecho Natural, cualquiera sea la causa
para la negación, es un delito moral y civil, y como tal si el Procreado se
siente agredido y despojado de su Derecho, en su representación la madre debe
tener la garantía de la Justicia para que la Ley haga que se cumpla el Derecho.
Si en los
cambios familiares habidos durante el crecimiento del Procreado, tras divorcio,
el status económico del ambiente familiar del Procreado es superior al de su
Procreador, la Justicia protege al Procreador en lo que, siendo el caso
contrario, está por la protección del Procreado, a fin de que las pasiones
derivadas del divorcio no sean manipuladas por la parte separada como arma de
venganza contra un ser inocente sobre el que se quiere recargar todo el peso
del fracaso matrimonial.
Teniendo en
cuenta que la persecución continua del ser inocente es un delito, el Procreador
hostigado, dado el hostigamiento, tiene materia suficiente de Derecho para
revertir la causa y por su inocencia proceder a la reversión de la situación
creada, y si injustamente despojado de su hijo adquirir justicia mediante el
descubrimiento de la maldad delictiva de su ex-pareja,
esta maldad causa efectiva de la ruptura matrimonial consumada con persecución
hasta el hostigamiento, cuando el hostigamiento de un inocente es un delito
moral, con implicaciones penales cuando induce al suicidio, a la demencia o al
crimen.
LEY
AUTOMÁTICA
Si en el
Parto la Ley Sistemática pone en las manos de las partes del Acto Procreador el
caso de Fraude de Paternidad, el hombre abandonará por piernas a la mujer,
quedando limpio de toda culpa y libre para defender su honor y su nombre
de cualquier imprecación mediante la Copia del Test Genético de Paternidad que
le habrá suministrado el Estado. La mujer cometió fraude, suyo es todo el
efecto de su delito.
Si durante
el tiempo de Gestación, e ignorante del fraude que la mujer preparó contra el
hombre, éste se casó, el matrimonio, descubierto el Fraude en la cama del
nacimiento, queda automáticamente anulado ante Dios y los hombres. El Estado
anulará automáticamente las actas de matrimonio, y lo mismo hará la Iglesia. La
Verdad es omnipotente y emite su juicio final según Justicia; la mediación de
tribunal es innecesaria e improcedente. El hombre queda libre delante de Dios y
de los hombres para casarse.
Si durante
el tiempo de Gestación la pareja invirtió en el futuro del Matrimonio a nacer,
descubierto el Fraude, la Ley actuará automáticamente borrando de todos los
contratos firmados a nombre de la pareja el nombre de la mujer. Todo será para
el hombre, sin reclamación posible por parte de la parte fraudulenta y su
familia, sea que estuviera envuelta en el fraude o inocentemente atrapada en él
al igual que el hombre.
Si el Fraude
se produce en el curso del Matrimonio consumado, deviniendo Adulterio, la
adúltera no regresará a la casa del hombre, su matrimonio queda automáticamente
anulado, lo mismo por el Estado que por la Iglesia, y el hombre queda libre,
delante de Dios y los hombres, para casarse nuevamente. Los hijos nacidos del
Matrimonio antes del Adulterio consumado permanecen en la casa del hombre.
Si un
hombre, conociendo la Verdad, adopta al hijo de una mujer en la cama de su
nacimiento, la Adopción equipara al Adoptado al Procreado, y lo convierte en
sujeto de Derecho al mismo nivel que los demás hijos de su Procreador Adoptivo,
sin ninguna merma ante la Justicia a la hora de la negación de sus Derechos en
razón de los futuros cambios familiares que pudieran producirse durante la vida
del hombre, y así sobre su testamento.
Si en la
cama del Parto una mujer reclama la paternidad sobre su hijo de un hombre, la
Ley actuará con todo poder y potencia para someter al hombre al Test de
Paternidad, y si así fuera el Procreado será reconocido hijo genético del
hombre a todos los efectos, disfrutando el Procreado del Derecho sobre el
Procreador con los hijos habidos en matrimonio o los por tener, quedando a su
vez el Procreador sujeto a las Penas que se traduzcan por negación de
asistencia al Procreado.
Si el caso
es de Adulterio y la mujer del adúltero actúa en divorcio, el hombre abandonará
la casa y la mujer se quedará en ella con sus hijos, expuesto el Adúltero a
todos los Deberes del Procreador, sin distinción sobre Procreados habidos en
matrimonio o fuera de matrimonio.
El Procreado
es Inocente respecto a los crímenes y delitos de sus Procreadores.
Si el caso
es de seducción juvenil, queriendo desligarse el joven de la joven, de querer
ésta tener el hijo, e invocando la paternidad sobre su hijo del seductor,
descubierta la Paternidad, el Procreador quedará de por vida ligado al
Procreado, exponiéndose a los Deberes del Procreador.
El nombre de
familia del Procreador será el del Procreado, nacido dentro o fuera del
matrimonio, con o sin la voluntad del Procreador.
LA
MAGISTRATURA DE LA CIENCIA DEL BIEN Y DEL MAL
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