La Tecnologìa Visual que Dios, nuestro Creador, ha puesto a nuestro servicio, con el único objeto de abrirnos los ojos de la inteligencia a las dimensiones del Cosmos, Creación personal Suya, cual se lee en la HISTORIA DIVINA DE JESUCRISTO, nos pone delante de los ojos un Campo de Galaxias, cuyos Bosques se multiplican a medida que avanzamos hacia sus territorios vírgenes. Lo que AYER les pareció a los sabios de los siglos XIX y XX un cosmos perfectamente catalogable, reducible a una simple imagen, en esta reducción imitando las imagenes religiosas del Mundo Antiguo, HOY, gracias a la Tecnología Astronómica por nuestro Creador puesta a nuestro servicio con el objeto de sacarnos de las Ignorancia en que vivieron nuestros padres según la carne; HOY podemos alzar la cabeza a los Cielos y con la sola ayuda de las Ingteligencia ver en nuestros ojos dibujado el Cosmos en Movimiento.
Grandes verdades emergen. Que la Cosmología del Siglo XX pusiera de rodillas a la Ciencia de la Astromomía no repercute en nuestra inteligencia de ninguna de las formas excepto en lo que se refiere a la necesidad de liberar nuestro Siglo de un sistema esclavista mental cuyo sentido específico es poner a disposición del Poder de los Nuevos Tiranos de la Humanidad nuestro Futuro, destruir el Crecimiento de nuestra Inteligencia en el campo de la Omnisciencia de nuestro Amadísimo Dios y Creador, y crear una nueva especir animal : El Animal Doméstico Sapiens, un ser desprovisto de la Naturaleza del Hombre creado a la Imagen y Semejanza de los Hijos de Dios.
Asì pues, los ojos que Dios ha puesto a nuetro servicio, no mienten; quienes interpretan lo que vemos y tiranizan a las generaciones imponiéndoles la interpretación maligna de la Cosmología del Siglo XX sobre el Origen y la Constitución General del Cosmos, cuna de las Guerras Mundiales del Siglo XX, cual la Reforma lo fuera de la Guerra de los Treinta Años, ésos sí mienten.
La Realidad no miente. Los ojos no engañan. Mienten y engañan quienes impotentes y estériles en el ámbito de la Ciencia de la Creación, incapaces de levantar un Mundo asentado sobre fundamentos indestructibles le negaron al Hombre su Origen Divino, vendieron sus almas a los Poderes Fratricidas cuya voracidad por sangre y carne humana no conoce límites, y HOY, queriendo devorar al Género Humano en su totalidad, ponen al serviciio de sus amos malignos todas las rmas necesarias para consuMar su Crimen contra las Creación, el Credor y su Criatura, el Hombre.
Regresando a la Verdad: El número de cúmulos de galaxias que llenan el Cosmos según nos acercamos a las fronteras de la Creación va en aumento. Aquella imagen omnisciente y todopoderosda de la CSXX al dìa de HOY se ha convertido en un castillo en el aire cuya visión es apta sólo para asnos.
La Verdad es ésta: El Cosmos es un Océano de Materia en crecimiento constante por el Espacio con el Infinito por límite de Expansión y la Eternidad por futuro natural.
El Origen de este Cosmos es Dios. El Movimiento de Expansión que le fuera natural a la Increación permanece en el seno de los campos de transformación de la energía cósmica en materia astrofísica que Dios le ha por costas al Cosmos. Este Movimiento Cosmológico de Expansiòn es ad eternum et ad infinitum.
No hay Contracción. No la habrá jamás.
El Infinito, la Eternidad y Dios son una Realidad Indivisible, Todopoderosa, Indestructible. Esta realidad es el Origen de la Creación, y este Origen es el Principio del Cosmos cuyos cúmulos de galaxias se multiplican y extiende sus Fronteras sobre los escombros del Cosmos Increado por el propio Dios destruído.
Ahora, expuesto este Dogma Sagrado, el alejamiento del cual conduce a todo mundo, pueblo e individuo a su autodestrucción, y firmemente establecidos en la Orden de la Naturaleza, nosotros debemos entender que lo que vemos en los Espacios Galácticos abiertos son imágenes del Pasado. Las estructuras galácticas que vemos existen, pero las fotos que vemos son memorias de un tiempo pretérito.
En realidad si nosotros viajamos más allá de la Región Andrómeda, a medida que avanzamos en el campo cósmico nos encontramos en la situación de alquien caminando por un bosque la propiedad de cuyos árboles fuese estar en movimiento, como si estuviesen vivos, de esta manera cambiando la posición de sus componentes según avanza el caminante; al cabo del tiempo nuestro caminante se encontraría perdido en un laberinto del que no podría salir nunca porque los puntos de referencia desaparecen según se avanza.
Dicho esto, viajar hacia un punto galáctico del Cosmos es perseguir un cuerpo que se aleja y se transforma según nos acercamos. Es decir, el Viaje en el Espacio Cósmico se transforma en un Viaje en el Tiempo.
Únicamente Dios, para quien el Cosmos es su Universo Natural, puede andar en este Bosque Mágico de Galaxias por la Autopista del Tiempo sin perderse en el Laberinto de los Cúmulos Galácticos. Sólo Dios puede entrar en este Laberinto y regresar al punto de partida sin perderse en el Espacio.
Comprendamos que un Cúmulo Galáctico situado a equis millones de años de nuestro Universo desde que emitiò su luz hasta llegar a nosoros ha seguido viajando por el Espacio y creciendo o transformándose acorde a las leyes del Cosmos en el Tiempo; lo que vemos no está donde lo vemos, lo que está no es lo que existe
El hombre que se va de casa y regresa al cabo de los años no puede esperar encontrarse a su regreso los miembros de su casa como si sus hermanos, hijos, padres y su mujer hubiesen estado congelados en el tiempo. Ni sus moradores son lo mismo, ni puede que estén donde estuvieron.
La imagen que recibimos de una galaxia situada a equis millones de años luz de nosotros es la foto de una galaxia que estuvo ahí hace esos millones de años, pero durante los millones de años pasados hasta el presente puede haber sido absorvida por otra galaxia, evolucionado hasta multiplicar su cuerpo, integrado en un cúmulo...
Igualmente durante el viaje por el Espacio el paquete de informacion emitido ha podido unirse a otros paquetes procedentes de galaxias distintas y juntas realizar el viaje a nuestro Universo, pintando en nuestros ojos retratos de una realidad que existe, pero que es sólo una realidad virtual.
En definitiva, las fotos del Cosmos más allá de la Creación Local son la memoria de hechos reales, expresión de un movimiento natural, pero de aquí a creer que el Movimiento Cosmológico está congelado en el Tiempo es cruzar la línea entre la cordura y la demencia. En ficción podemos imaginarnos viajando por el Cosmos más allá de la Región Universal Andrómeda; la Realidad es que sólo Dios tiene acceso al Campo Cósmico. Mientras antes nos desprendamos de la estupidez impuesta sobre y contra todos por la Tiranía de una Academia vendida al Poder de las Armas y la música de los tambores de Guerra, antes alcanzaremos la sabiduría; pero si la estupidez es signo de sabidurìa, entonces estamos en manos de locos.
Las imágenes que la Revolución Radioastronómica del finales del XX y principios del XXI sobre el Cosmos ha puesto delante de nuestros ojos son muchas. El Catálogo Abel de cúmulos galácticos o ACO suele contar unos 5300. Aquí importo las imágenes de unos cuantos, las suficientes para darnos una idea de la realidad del Cosmos. Juzgad por vosotros mismos qué pasaría si nos viesemos atrapados en uno cualquiera de esos bosques galácticos.
Esta direcciòn www de arriba es la Lista Oficial de Cúmulos Galácticos legada al Siglo XXI por los distintos Observatorios Astronómicos del XX. Al día de HOY se ha quedado corta, pero es lo suficientemente amplia para comenzar a aplaudir la Caída de ese castillo para asnos que en obediencia a sus amos políticos la Astronomía del Siglo XX levantó en el aire. l |