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MIS DIARIOS

EL DIARIO DE LA CORRUPCIÓN

 

 

21/12

DEJAD QUE LOS NIÑOS SE ACERQUEN A MÍ

 

El Hombre, creado a la Imagen y Semejanza del Hijo de Dios, por la Fuerza misma de la Naturaleza Divina que le ha sido comunicada, levanta su Pensamiento hacia quien es la Fuente de su Inteligencia. Dicho esto, el Hombre es un ser social porque su Creador lo es. La Sociedad no surge de un acto de imposición de una bestia depredadora sobre los demás individuos de su misma especie. Ya sabemos que este pensamiento maligno y demencial es el que impuso en las universidades y las escuelas la doctrina del evolucionismo materialista del ateísmo científico, germen de las guerras mundiales y argumento necesario al que se abrazan todos los dictadores, genocidas, enemigos de la Vida de sus semejantes y de la Paz entre todos los seres humanos. Como Pilatos se lavó las manos, la comunidad científica se lavó las suyas en el océano de sangre de las guerras mundiales, vasija inmunda en la que las clases políticas se lavan las suyas  mientras defienden sus conductas hipócritas protegiendo esa doctrina satánica, ser el hombre una bestia depredadora nacida de la cuna de la ley del más fuerte.

 Ser Cristiano significa un rechazo total y absoluto a una doctrina fratricida genocida, que tiene, al día de hoy en la comunidad Nobel su templo, desde cuyas puertas los mensajeros de la Guerra esparcen su cizaña maligna por toda la Tierra.

El Hombre, creado a la Imagen y Semejanza del Hijo de Dios es social por Naturaleza. La Sociedad no tiene sus raíces en la ley del más fuerte. La Sociedad tiene su Origen en la Ley del Amor por la Vida del Creador del Universo. Un Amor por la Vida en el Universo que devino Pasión Creadora hasta el punto de elevar la Vida de su Creación a su Dimensión Eterna. En este Amor por la Vida de su Creación  la Naturaleza Social de Dios  se desarrolló en la Eternidad hasta darle forma a su Universo, fundando su Reino sobre los cimientos de una Civilización Universal a cuyos Muros Él les comunica su Naturaleza. Levantado este Edificio, nos toca a su Creación estudiar el Plano de Ingeniería Social que le sirvió para establecer dicho Reino.

Sigo aquí el Método Divino: “Haz según el Modelo se te muestra”. Quiero decir, el Modelo  ya existe, es una Realidad Eterna. Todos sabemos que el Primer Modelo sobre el que el Creador  unió a su Vida al Hombre fue sacudido por un terremoto infernal, cuyas olas Homicidas ahogaron a la primera generación de los hombres.

Antes los Hechos Consumados, la Necesidad de levantar un Nuevo Modelo Social Universal, inmunizado contra futuras sacudidas estructurales, se hizo.

Hablando sobre Acontecimientos ya historizados, y pues que su Fundación tuvo su Conclusión aquí en la Tierra, con la Glorificación del Hijo de Dios al Trono Universal sobre todos los Mundos de la Creación y sus pueblos, y porque este Reino del Hijo de Dios es ya un Edificio investido de Eternidad, este Reino es el Modelo Social de referencia universal sobre el que toda Civilización existente en los Cielos basa su Estructura. Dicho esto, lógico que definamos cuáles son las columnas sobre las que Dios ha levantado el Reino de su Hijo.

Tres son estas columnas.

La Primera es la Corona. El Rey, JESUCRISTO, es el Jefe del Estado, Cabeza Suprema y Única de todos los Ejércitos de los Pueblos de la Creación. Al Rey es la Obediencia Debida Final y Primera de todos los Cuerpos Militares del Estado Divino; la Vida de este Estado es la Paz Universal.

Cualquier pueblo o grupo de individuos que atenten contra esta Paz entre los pueblos del Reino del Hijo de Dios, con independencia absoluta de los argumentos para abrir una brecha contra la Paz en la Fraternidad Universal, se instala en Delito contra la Corona del Hijo de Dios y, por cohecho, contra la Creación de Dios.

En el Rey; JESUCRISTO; y en Dios, YAVÉ, siendo Dos Personas, vive un mismo y único Espíritu. No existe entre el Rey y Dios división de ningún tipo. En el Rey vive Dios. En Dios vive el Rey. La Sabiduría y el Todopoder del Señor Dios Yavé son las joyas de la Corona del Señor Rey Jesucristo.

Toda Criatura que se declara rey sobre un pueblo de la Creación se instala en Delito contra la Ley de la Corona Divina; la Transgresión de esta Ley conduce al Destierro de la Creación, Sentencia sellada contra la generación de los hijos de Dios, no de nuestro Mundo, que se alzaron contra la Ley de la Coronación Universal del Hijo de Dios. Sobre esta Ley se funda la Civilización Universal de los Cielos, y es sobre esta Ley que  la Civilización del Hombre sobre la Tierra hace su Camino a la Puerta de la Eternidad.

La Civilización Divina el Modelo a cuya imagen y semejanza debe el Hombre levantar la suya, se entiende que la Unidad de todos los Ejércitos de la Plenitud de las naciones, su Obediencia a la Corona del Rey de los Cielos, Horizonte al que Dios dirige nuestra Historia, es la Garantía Incorruptible e Indivisible de la Paz Mundial entre todos los pueblos por los siglos de los siglos.

La Misión por la que los Ejércitos viven, Paz entre todos los pueblos de una Nación, y su incapacidad o su alianza con quienes  buscan el Odio como puerta a la Guerra Civil, sea por ideología nazi-racista contra sus vecinos, o con actos de Terror contra sus semejantes, implica a las cuerpos de esos ejércitos en Traición a la Paz de los Pueblos, de cuyos hijos se nutre su Cuerpo, y a cuyos padres y hermanos traicionan,  abandonando en manos del Odio Independista y del Terror Nacionalista el Sentido de su Existencia y Vida. La Sentencia contra la Traición a la Paz es el Destierro de la Vida.

Así pues, la Naturaleza de los Ejércitos de la Corona Divina es ser la Paz en Cuerpo y Alma. La Obediencia de este Cuerpo a un Gobierno Local, con vocación vitalicia, entregado a la División, y fundando su victoria en el Odio y el Terror de sus aliados contra los pueblos cuya Paz el Ejército en Cuerpo y Alma debe defender y proteger, en los Cielos como en la Tierra, y porque renuncia a su Vida y Traiciona la vida de los pueblos acogido a la Bandera de su Defensa, doblando las rodillas ante la Dictadura Anunciada, la Sentencia contra este Delito es el Destierro de la Vida.

Dios ha establecido, por consiguiente, para la Preservación de la Paz que los Ejércitos de todos los Pueblos de su Creación vivan en un Cuerpo Universal, y su Obediencia esté exclusivamente sujeta a la Corona de su Reino.

El Deber Divino de este Cuerpo es levantarse contra cualquier cuerpo civil que rechazando la Ley Divina pretenda poner a sus pies la Obediencia debida a la Paz.

La Paz entre todos los hombres es un Derecho Divino. La Paz se funda sobre la Unidad de todos los pueblos en una misma Ley y Civilización.

Entonces, los Ejércitos son a la Sociedad lo que el esqueleto es al cuerpo. El cuerpo no puede subsistir sin el esqueleto. Si el esqueleto enferma el cuerpo pierde la salud, pérdida que, si en aumento, le conducirá inexorablemente a la muerte.

La Salud le es al cuerpo lo que la Paz le es a la Sociedad; cuando los Ejércitos se ponen de rodillas se entrega a la División y el Odio entre los pueblos: en obediencia debida a un Gobierno  Pro, o Dictatorial, esa Sociedad y Nación firman su desaparición de la Historia. Firma que se verá en activo en los próximos años a cumplirse sobre Rusia, una Nación y Sociedad  instalada en el Crimen contra el Género Humano como modus vivendi.

Dicho esto, siendo el Cuerpo Militar el esqueleto de la Sociedad, el Gobierno es la cabeza nacional, cuya función es dirigir el Movimiento de la Sociedad por el camino siempre en crecimiento del Futuro de la Civilización. Ahora bien, cuando un Gobierno aniquila la Naturaleza de los ejércitos, lo pone de rodillas y lo hace renunciar a su Poder para Defender la Paz, arrojando a la División que nace del Odio a los pueblos bajo su Bandera, y al servicio de ese Gobierno  establece la Dictadura sobre el Terror a sus Fuerzas : un Gobierno semejante es enemigo de la misma Sociedad que alzó para mantener la Unidad Social. De manera que dependiendo la Paz del Cuerpo de los Ejércitos, la Unidad Indivisible entre los pueblos de una Nación pertenece, como función específica, al Gobierno.

Un Gobierno que conduce al cuerpo social al abismo de la Dictadura, como medio de salvar la Guerra Civil que procede de la ruptura de la Unidad social entre los pueblos de la Nación, ruptura de Unidad que alimenta con el fin de  fundar su dictadura vitalicia,  es un Gobierno que  se declara Enemigo de la Sociedad : contra el que el Cuerpo de la Paz tiene el Deber Divino y el Derecho Civil de alzarse  para impedir que la Dictadura de ese Gobierno se consuma.

Un Gobierno que traiciona la Unidad de la Nación que le dio el Poder de dirigir su Futuro  por el camino de la Civilización, es un cuerpo delictivo que alimenta el Odio entre los pueblos y se inviste de un brazo de terror a fin de conseguir la Paz en el seno de una Dictadura, legítima por en cuanto salido de la voluntad popular, pero ilegítimamente obtenida en cuanto se le ocultó a los pueblos su vocación antidemocrática para hacer de su voto palanca hacia la dictadura; único medio de salvar la Guerra Civil necesaria para  obtener sus aliados la Independencia proclamada por el Nacionalismo.

Cuando un Cuerpo Social está dirigido por esta cabeza, su futuro es la ruina. Ejemplo vivo de esta ruina, con éxito alcanzado, la vemos establecida en Venezuela, donde el Cuerpo de la Paz traicionó su  existencia y arrojó a los pies de un Gobierno Dictatorial Vitalicio  su Poder, por ese Gobierno usado para mantener por el Terror a los pueblos de la Nación. La Nación sobrevivirá pero ese Cuerpo Político-Terrorista será desterrado de la Vida en los próximos años.

No hay Amnistía para los enemigos de la Unidad y la Paz entre los hermanos, como en los Cielos así en la Tierra. NO la hay para los Enemigos de la Creación de Dios, ni Hoy, ni nunca en la Eternidad.

Pero ¿qué es un Cuerpo sin Espíritu?

Observamos entonces que las dos primeras Columnas, La Paz y la Unidad, de la Civilización del Reino del Hijo de Dios viven de la Ley de la Corona. Mediante el Cuerpo Militar de la Plenitud de las naciones Dios ha establecido la Paz Universal en el Amor a la Vida. Es la Paz la tierra donde todos los frutos de la Civilización crecen libremente. Y al contrario, es en el campo de las guerras donde todos los frutos d de la Muerte se hacen fuerte. Al decir Dios : “Cuando la cultives te dará espinas y abrojos”, no se refería al suelo de la tierra, sino a la inteligencia humana. La Guerra es el suelo de un infierno en cuyo campo, aunque tienen en apariencia fruto de progreso, se descubre que su fin natural es la destrucción absoluta de toda vida, como vemos al presente. ¿Dónde han quedado aquellas promesas de utopía científica que bajo aquella bandera de libertad de pensamiento la comunidad de los sabios levantaron contra con la Fe? Hay que decirlo: Enterradas en los campos de las guerras mundiales.

Así pues, un cuerpo sin espíritu es un ente animal que se rige por la ley del fuego y del hierro. Ley que el ateísmo científico abrazó, y en cuyas entrañas nacieron los dos monstruos que en el siglo XX se devoraron mutuamente: Comunismo y Nazismo.

El Tercer Pilar de la Civilización Universal es la Religión de la Iglesia Católica. En este Cuerpo vive la Verdad Eterna que extiende su existencia por todo el Universo, cuyos dogmas son conocidos de todos y por cuya Fe nos viene a todos el Poder de ser hijos de Dios. Hijos de Dios a la imagen y semejanza de aquel Hijo de Dios que se hizo hombre para mostrarnos tanto el Verdadero Rostro del Hombre creado por Dios cuanto el  de Nuestro Creador. Y la conclusión de cuya Doctrina se puede reducir a dos Dogmas: “Dios es Amor, y Amarás a tu prójimo  como a ti mismo”. Dogmas eternos que abarca a todos los Mundos del Reino de su Hijo, y cuya Maravillosa Potencia es abominada por Nacionalistas, Independistas, Dictadores, Genocidas, y todo aquel que  levanta contra su prójimo la ley del Odio y del Terror. Siendo este Rostro de Dios y del Hombre: su hijo, en quien vive su Pensamiento y Espíritu, ¡qué hay más natural que levantarse contra la Iglesia Católica y desterrar su Religión de las Escuelas, declarándole así la guerra a la Palabra de Dios: “Dejad que los niños se acerquen a mí”.

Concluyendo, la Paz del Cuerpo Social sujeta a la Obediencia de los Ejércitos de la Plenitud de las naciones a la Paz Universal del Rey, y la Unidad sujeta a la Ley de Servicio de todos los Gobiernos del Cuerpo Mundial cuya Cabeza es el Rey Divino, la Verdad Universal Sempiterna que gobierna el Pensamiento de todos los hombres tiene su Cuerpo Vivo en la Iglesia Católica, de cuya Doctrina emerge el Poder que hace del Hombre un hijo de Dios: Principio y Fin de su Creación, Crecimiento y Desarrollo en la Sabiduría de su Creador.

La Función, cerrando, del Gobierno es la Unidad en la Fraternidad de todos los pueblos bajo su Administración, aplicando la Ley contra los  sembradores del Odio y del Terror.

La Función del Ejército es la Paz, y como su Cuerpo que es, ha sido dotado de Poder por el Derecho Divino del Hombre a la Paz, para levantarse contra cualquier Gobierno que use la Democracia como palanca a la Dictadura.

La Función de la Iglesia es cultivar el espíritu de la inteligencia en la Infancia a fin de engendrar en el hombre un ser libre, incorruptible, amante de la Paz, de la Vida y de la Civilización.

Sobre estos Tres Pilares le edificaremos a las generaciones venideras una Civilización abierta a los siglos  y los Cielos; Civilización nacida para formar parte de un Reino abierto a la Eternidad e Infinidad de Pueblos, unidos todos en un mismo Espíritu de Verdad, de Inteligencia y Amor a la Vida del Rey y de Dios. La Semilla que vive en todos con Origen en una misma Raíz la Paz y la Unidad Mente y Corazón de todos en todos los frutos de este Árbol de la Vida, cuya Cabeza es el Rey, de cuya Corona emergen todos los Gobiernos para la Felicidad y Libertad de todos, Sumo Pontífice Universal, ¿pues quién se atreverá a presentarse delante del Señor Dios Creador del Nuevo Cosmos?, Juez Todopoderoso, Incorruptible, Cabeza de todos los Estados de todos los Pueblos de su Reino, en Cuyo Nombre y al Servicio de cuya Corona y Trono enjerce el Gobierno Universal su Casa, cuyos nombres todos conocemos, sus Apóstoles: Cuerpo Vivo del Espiritu que vive en el Dios y su Hijo, Espíritu Santo, Inmaculado, Herederos del Poder de Cristo: Su Palabra es Dios, ante cuyos ojos nada se oculta, cuyo amor por la Vida de todos quedó sellado con su sangre. Cuerpo del que se dice : El Espíritu Santo es Dios.

alegría entonces, porque no volveremos los hijos de Dios a sentirnos solos durante los Días de la Creación, pues en su Rostro Dios estará siempre con nosotros.

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19/12

LA PALABRA DE DIOS ES LEY. ALEMANIA Y LAS RODILLAS DEL PAPA

 

La existencia de la fuerza teleológica filogenética conductora de la creación hacia la vida eterna es una realidad preexistente en todas las sociedades humanas desde los principios de las familias primarias, que se tradujeron en los sentimientos e instituciones religiosas, cuyas historias, envueltas en mitologías y leyendas, conocemos actualmente. No hay pueblo en la Historia de la Humanidad cuyo principio no contenga un servicio religioso. Todas las religiones de la Antigüedad  tuvieron su fin en la existencia de una vida eterna al otro lado de la vida en la Tierra. Esta fuerza vital fue la que cayó en los abismos de los sacrificios humanos, fuese en forma de guerra santa, fuese en forma de sacrificios humanos, necesitados de la guerra para su realización. La respuesta a esta desviación hacia una convivencia infernal entre las familias y los pueblos humanos determinó la naturaleza de los servicios religiosos de los que todos los pueblos esperaron obtener abierto el acceso a la vida eterna.  La Causa Primera en el origen de esta desviación está escrita en el Libro de Dios, Herencia de la Iglesia Católica, Esposa de Cristo Señor. El Rechazo de unos pueblos hereditariamente sumergidos en los Sacrificios Humanos y en la Guerra, en realidad las dos caras de la misma moneda, a la Respuesta de Cristo sobre La Causa de dicha Desviación del Camino a la Vida Eterna por el Creador  comunicado a su Creación, es una Respuesta que pertenece tanto a la Historia de las Religiones cuanto a la Historia de la Iglesia Católica. La Historia Universal de Europa es argumento suficiente para ver la existencia de esta fuerza vital, las respuestas religiosas a la necesidad de las religiones y el rechazo y guerra santa contra la Respuesta de Cristo, Herencia de la Iglesia Católica, Madre de Cristianismo. Esto dicho, la Reforma Protestante Calvinista se presentó con una Respuesta propia según la cual no hubo jamás Desviación, ni siquiera Caída, es decir, la Respuesta de Cristo fue una falsedad absoluta, porque según la Reforma Luterano Calvinista, esa Desviación y Caída del Hombre en el Sacrificio Humano y en la Guerra Santa  fue predeterminada por el propio Creador, quien siendo Omnisciente y Todopoderoso impone su Voluntad, contra la que la creación no puede hacer nada. Lutero, Calvino y Enrique VIII rechazaron la Respuesta de Cristo.

Puesto que en Cristo Raúl contra el Anticristo la respuesta al anticristianismo del pensamiento de la Reforma, pensamiento sembrado por el  Maligno, contra el que Dios  previno a su Iglesia,  ha sido manifestada, conviene recordarle a todos los cristianos que por la Fe han adquirido el Poder de ser hijos de Dios, que este Poder tiene su Origen y Principio en el Pensamiento de Cristo,  y quien rechaza este Pensamiento, no importa la naturaleza de sus palabras y obras, se aleja de la Puerta de la vida eterna. Lo que define a todos los hijos de Dios, de los Cielos y de la Tierra, es el Pensamiento de Cristo, es decir, la Respuesta de Dios a la Causa de la Caída del Hombre.

Podría argumentarse que siendo Cristo un hombre y deseando la vida eterna justificó lo injustificable por miedo a ser privado de esta dimensión a la que fue llamada la Creación por su Creador. Previendo este argumento quiso Dios anular la  naturaleza divina del mismo haciendo que su propio Unigénito fuese quien nos diese la Respuesta. Siendo Jesús de Naturaleza Divina, la vida eterna su Dimensión Existencial, imposible su Destrucción, su Palabra, libre de todo Miedo, devendría la Respuesta, cuya Creencia nos da a todos la Llave que nos abre la Puerta de la vida eterna. El Pensamiento de Cristo devino la herencia de su Casa. Así pues, por la Fe heredamos el Poder de ser hijos de Dios, y este Poder, natural a quienes gobiernan con su Padre y Rey la Creación de Dios, nos legitima para elevarnos al Gobierno del Mundo, a fin de hacer que la Ley del Creador sea el Camino por el que su Creación subsiste en la Eternidad.

Como contra la Madre se alzó en su ignorancia el mundo antiguo, permaneciendo el Enemigo, la Muerte, se entiende que el mundo actual se alce contra los hijos de su Señor. Nada nuevo bajo el Sol, excepto los hijos de Dios de la Casa del Rey.

Ya estamos sumergidos en la Batalla Final. La Ofensiva contra el Poder de esta generación de hijos de Dios, herederos del Gobierno de la Plenitud de las naciones por Derecho Divino, la estamos viviendo. Las nuevas fuerzas de la Muerte se han levantado para causar divisiones civiles fratricidas en las naciones cristianas; investidas de progreso y  bienestar, de palabra, están conduciendo al anticristianismo más radical a pueblos fundados sobre una Ley de Progreso y Bienestar con raíz en la Ley Divina. En nombre de un humanismo homicida se les han abierto las puertas de la Civilización Cristiana a pueblos enemigos de los Derechos Humanos y Divinos del Hombre, cuya aspiración es derrocar la Ley Cristiana e imponer la ley del infierno, ley de Terror y de Odio a la Fraternidad entre todos los pueblos, sin la cual no puede haber ni Libertad ni Justicia. La nueva generación de hijos de Satán, engendrados en las entrañas de la Iglesia Ortodoxa Rusa, se han lanzado a la Guerra por la corona sobre todos los reinos y naciones del mundo, corrompiendo gobiernos, financiando independencias,  levantando dictaduras,  alzando guerras civiles... al amparo de instituciones internacionales, dirigidas por organizaciones nacionales corruptas, el fin de cuyas políticas es mantenerse en el Poder sin importarles quien mantenga sus  niveles de dioses, más allá de las leyes de los hombres y de Dios. Batalla Final perdida para ellos, pero que están dispuestos a ganar en la creencia de ser superior la Muerte y su rey a Dios y su Rey. Rusia se ahogará en su sangre, China se asfixiará en su cielo, Venezuela, Nigeria, Arabia, Irán… se hundirán tragados por la sangre con la que han regado sus tierras. Los hijos de Dios no nacen para  glorificarse  a sí mismos sino para glorificar a su Rey, a quien le pertenece el Gobierno de la Plenitud de las naciones, de este y de todo Mundo creado por su Padre en los Cielos.

Dicho esto, el espíritu de Cristo se encuentra al presente en el dilema de los siglos. Cuando un obispo llega a Roma y es glorificado como Santo Padre se encuentra delante de dos puertas, derivar hacia la locura de quien se cree que puede enmendarle la plana a Dios y hasta blasfemar su Nombre con sus obras, o servir a Dios contra los siglos manteniendo la Vida de la Iglesia en el Templo de la Eternidad.

El Conocimiento de los pueblos en la Ciencia de la Creación tiene por límites la Omnisciencia Creadora aplicada a la Naturaleza de la Criatura. Pero la Ley del Creador es Eterna, y es a esta Eternidad que Cristo le erigió un Templo. No Matarás, no robarás, no levantarás Falso Testimonio, amarás a tu prójimo como a ti mismo… no es un consejo, es Ley de Vida Eterna.

 Tan ley como lo es toda Palabra de Dios; No te acostarás con hombre como se acuesta con mujer, es Palabra de Dios, no es un consejo que se pueda revocar o simplificar o sujetar a los intereses de los tiempos.  NO puede haber bendición contra la Palabra de Dios.  A menos que un Santo Padre haya Caído en la locura de muchos de sus antecesores y se crea más bueno y más misericordioso que el propio Dios, la Palabra de Dios sólo puede ser retocada por un hombre que niega a su propio Señor.

NO debe extrañarnos que quienes hayan negado, en primera instancia, la Naturaleza Divina de la Palabra de Dios, hayan sido los sacerdotes alemanes. Nación enemiga de Dios y de su Civilización desde su nacimiento, instalada en el genocidio contra humanidad desde su ingreso en la Europa Cristiana, rebelde contra la Iglesia de Dios, a la que acusó de ser una Ramera, poniendo en su boca las palabras del mismo Satanás, su señor y padre, a Ella, la Esposa del Señor Jesús,  contra la que se levantó en Guerra Santa, arrastrando, en su Odio a la Humanidad y a sus hermanos católicos, a las naciones europeas a la guerra civil mundial de  los 30 años, absuelta de su Delito contra la Humanidad por las Guerras mundiales del Siglo XX, esa nación enemiga de Dios y de los hombre en cuanto se ha recuperado de su maldad ha regresado a darle su oreja a Satán y su boca a la Muerte, rechazando la Palabra del Señor Dios YAVÉ, amenazando con Cisma de no  arrodillarse el Obispo de Roma a su voluntad: Bendecir lo que Dios  prohibió desde el principio: la unión de  un varón con otro, de una hembra con otra hembra.

Así pues, porque la sierva del Maligno ha puesto de rodillas al Obispo de Roma, el Señor Dios YAVÉ, contra cuya Palabra se ha vuelto a alzar, va a borrar a Alemania del Mapa de su Pueblo, romperá la Federación, y el nombre de Alemania, este nombre será maldición para las naciones que surgirán de su destierro de la Historia.

Y en cuanto al Obispado puesto de rodillas, su Señor pondrá  a la cabeza de la Jefatura de sus Siervos un Obispo joven y fuerte, contra cuyo espíritu se romperán las olas de la Muerte, y ante cuya vista huirán los enemigo de su Señor como lo hacen los lobos delante del león.

 

 

18 / 12

¿Puede un Estado firmar un Tratado y hacer de la Nación un pueblo traidor a su Palabra? ¿Cuándo un Estado forma un Tratado lo hace en nombre de la Nación o en nombre de los intereses de un Gobierno con cuya caída el Tratado pasa a ser agua en el río de los intereses  de un grupo de individuos? ¿Qué es un Estado? ¿Quién lo creó? ¿Con qué objetivos se creó? ¿Es la Nación la creación de un conjunto de pueblos que se unen para  la Defensa de la Libertad, su Dignidad y la Felicidad, la Paz y la Salud de todas las familias unidas en la esperanza de alcanzar y mantener estos horizontes de Justicia Y Fraternidad? ¿Se corresponde la creación del Estado a este Horizonte? ¿Por qué y bajo qué razones una arte de los pueblos creadores de la Nación Histórica, origen de todos sus avances, traiciona la creación del  Estado creado para garantizar el movimiento de la la victoria de este Estado Futuro y se conjura para derribar dicho Estado? ¿Es locura, es demencia, es esquizofrenia, es paranoia,  o es una degradación filogenética producto de una endogamia basada en la superioridad de una raza  a las demás familias hasta entonces hermanas y contra las cuales rechaza la Libertad, la Paz, la Salud, la Felicidad y la Dignidad Natural , herencia del Origen Divino del Hombre, como herencia de esas familias a las que demoniza y contra cuyo rostro arroja la dialéctica de una excomunión social maligna, hasta el punto de invocar la Necesidad del Terror y de la Guerra Civil como medio bueno para alcanzar la Destrucción de ese Estado en pro de la consumación de la Traición a los padres fundadores de la Nación Histórica?

El hombre no puede vivir  ajeno  al movimiento del Tiempo a su alrededor. La dimensión que define al ser humano es precisamente al Movimiento del Tiempo. Llamamos a este Movimiento Historia Universal. No vivimos en las páginas de un libro. La Vida no es una historia unidimensional, un espectáculo al que se es ajeno.  Alejarse del Movimiento esperando encontrar en una dimensión unipersonal la Paz, la Salud, la Felicidad, la Libertad, es rechazar la condición Humana. La Vida lo penetra todo y mueve a todos los seres hacia un Fin Universal. Alejarse de este Movimiento, alzarse contra este Fin Universal, significa declararse enemigo de la Humanidad. El Individuo, sea  familiar o nacional, no puede  alzarse contra el Movimiento Universal que  distingue a la Vida del Hombre sin cometer un Delito contra la Humanidad.  Las Naturaleza de este Movimiento del Tiempo puede distinguir y definirse viendo su Trayectoria a través de los siglos.  

La Guerra Civil entre las Naciones procede de la Ignorancia de este Fin. Durante Milenios los pueblos vivieron alejados del Conocimiento del Fin Universal hacia el que la Vida mueve al Ser Humano.

Presente en sus inconscientes la existencia de este Fin, durante todos los siglos los seres humanos intentaron descubrir  ese Fin, abrir su Sello, entrar en su Naturaleza. Inventaron religiones, desarrollaron ideologías, hicieron de las naciones armas de dominio y destrucción en la creencia de poder  escribir ese Fin Universal e imponerle al Universo su visión de la Vida Humana en el Tiempo.

La Historia  recoge en sus Capítulos las luchas entre esas religiones e ideologías nacionales alzadas en pro, unas del Imperio, y otras del Destierro Onágrico de unos pueblos y su aventura por  sobrevivir sin contacto con el resto de los pueblos.

El concepto de superioridad de la raza se ve en los pueblos primitivos cuando hicieron patrimonio de sus familias la palabra “Hombre”; para ellos los demás pueblos, aunque tuviesen apariencia humana,  formaban parte del mundo de las bestias, de las que, teniendo que alejarse, condujeron a sus familias a  hacer de los  medios habitables mas inhóspitos sus moradas ancestrales.

En el discurso de los Nacionalistas, en este caso Hispanos, leemos  una vez y otra  el desprecio de los pueblos españoles, a los que se les emparenta con las bestias, a la par que por esta declaración se proclaman razas superiores a los demás pueblos hispanis, contra las cuales el Terror y la Guerra son medios buenos y necesarios para alcanzar ese Reconocimiento de Superioridad por la parte del Estado creado por dichas bestias, entre las cuales vivieron y convivieron mientras  su Estado fue una mina de oro. Pero una vez seca la mina, se acabó la condescendencia con tales pueblos, genéticamente degenerados y con los que emparentarse es herejía nacional en razón de la degradación que el fruto de esa procreación impone a la limpieza ÉTNICA DE TODA RAZA SUPERIOR.

La Guerra por imponer el Dominio de unos pueblos sobre otros sobre ha sido la Fuerza  que la Muerte impuso en la Tierra. Lejos de levantarse y vivir esta Fuerza como una Abominación Fratricida entre naciones, observamos como esta Fuerza se ha sido investido de Potencia Termonuclear y puesta en manos Homicidas y Genocidas para arrastrar al Género Humano al Fin Natural que la Muere persigue, reducir a polvo toda vida en la Tierra.

La alucinación de victoria contra la Muere en base a ser sus siervos y darse por padre a su príncipe, rey del Infierno es sólo eso, una alucinación maligna en la que  serán devorados los mismos que se alimentan de esa quimera:  heredar de aquel Satán todos los reinos del mundo. El núcleo de esta quimera reside en la creencia de estar buscando Satanás la forma de no ser desterrado del Cosmos una vez conquistada por sus hijos la Tierra.

La Verdad, toda la Verdad y nada mas que la Verdad es que el objetivo de Satanás es  servir a su Madre, la Muerte. El Decreto de su Destierro de la Creación ha sido activado; y no hay poder en la Tierra ni Fuerza en la Muerte que pueda impedir su ejecución; el SEÑOR DIOS YAVÉ es quien ha hablado y el SEÑOR REY JESUCRISTO quien ejecutará su Decreto. Quienes se mantengan en esa quimera creyendo que podrán  imponerle al Creador de Cielos y Tierra leyes propias, creando un Orden Mundial basado en las armas termonucleares, serán borrados de la Historia. Cada cual elige en qué filas se alistará: si en las de la Muerte o en las de la Vida.

 

 

15/12

LA ERA DEL REY

 

Decidme mortales, poderosos y ricos, dioses por un segundo, señores de las tinieblas, amos de la mentira, traidores a vuestras palabras, que en las piedras tenéis vuestra gloria y vuestra grandeza, decidme, vosotros que habéis amado la imagen y semejanza que Satanás os ha puesto delante, y habéis de rodillas aceptado la corona de vuestras pasiones abominables, contestadme ¿dónde nacen vuestras lenguas?, ¿en qué lago oscuro el río de vuestras palabras se derrama sobre la Dignidad de mi pueblo? Y tú,  Género humano, ¿no sabes que quien vive de rodillas es  una bestia sin futuro? ¿Qué es este mundo sino una ruta al infierno? ¿y vais a seguir el camino que a golpe de látigo os obligan a seguir los señores de la guerra y sus esclavos políticos? Levantaos del polvo, reclamad lo que os pertenece: la Dignidad de un hijo de Dios y ciudadanos del Reino de su Hijo. Derribad los muros a cuyas piedras os han encadenado vuestros enemigos sonrientes, con sus infames manos arrojándoos de vuestros tesoros las monedas de cobre como quien tira a perros los despojos de sus banquetes.

Moriréis en vuestros crímenes, y os decís, todo hombre muere, somos polvo que el viento de la eternidad esparce por el cosmos. Y sí, así será. Pero después os enfrentareis a una Segunda Muerte; adonde seréis desterrados, allí no hay vino ni mujeres, los malditos no bailan al son de fiestas; el fuego que os devorará no se consumirá nunca, el odio de todos vuestras víctimas lo alimentará por la eternidad, y os devorareis por tiempo infinito alcanzando la gloria que buscáis, ser  demonios por derecho y de hecho.

¿Quién es el demente que vende una eternidad al precio de vivir un segundo la vida de un dios mortal? La Serpiente que llevaba dentro aquel que traicionó a su Dios, hundiendo su creación en  el infierno de la guerra sin fin, encontró en vuestro padres bosques, selvas y cuevas en las que parir más basiliscos, y ha entrado en vosotros.

¿Creísteis que el Señor Dios del Cosmos escribió un cuento para niños cuando llamó Serpiente al asesino del Primer Hombre? Como aquella Serpiente que hizo de su palabra un arma de muerte, vosotros hacéis de la  vuestra daga asesina, puñal de traición, escalera al cielo del Poder y la Gloria que viene de las piedras, metales preciosos, oro negro, diamantes, platino y  rubíes son vuestra pasión,  la fuente del  lago oscuro en el que nacen los ríos que por el lecho de vuestras palabras expanden veneno  de guerra civil .

Soñad con la dictadura vitalicia de reyes que duermen en la tumba, con la tiranía absoluta del que vive más allá de la ley y la justicia, que el terror no os alcance, que tiemblen vuestros enemigos, porque el fuego de la Serpiente en vuestras bocas los devorará.

Alea jacta est, os habéis dicho, y sin embargo nadie os lanzó un decreto de proscripción. La Necesidad de haceros proscritos para justificar vuestro delirium tremens político os ha arrastrado al precipicio. Mientras más andáis más progresáis hacia el abismo. Mi Rey levantará a su pueblo con la fuerza del huracán que aparta la brisa y  deja caer sobre los árboles altos y orgullosos los rayos de su Justicia, se oirá su Voz entre las estrellas, y su Ley lloverá un diluvio de Dignidad y Libertad sobre toda la Tierra.

El que quiera vivir que se aparte del traidor que vende su alma por un segundo de gloria. El Poder es del Rey  de los Cielos y ante su Tribunal deben responder todos los  discípulos, hijos y servos del rey del Infierno.

Ha nacido el Día, ha llegado la Hora, cómo no  levantar la Voz, dejar que el espíritu  alce sus ojos a la Luz de la Verdad, fuente de toda Vida. La Sabiduría me ha secado los ojos, ha ensanchado mi corazón y vuelo como un pájaro del paraíso con un mensaje en el pico para todas las naciones del mundo: El Rey se ha levantado y viene a hacer la Voluntad de su Dios.

El ruego milenario del Espíritu Santo, “Ven, Señor Jesús”, ha conmovido el Alma del Creador del Universo. Ya no pueden más sus ojos soportar la visión de mi mundo arrastrado por las fuerzas de la Muerte a su destrucción. ¿Quién le cerrará la boca al espíritu de Yavé que en mi ser vive? ¿Quién le pondrá cerrojos al océano de la Inteligencia que el Creador le ha dado a su criatura? ¿Quién talará el monte en las alturas sobre el que mis pies se han alzado para contemplar el futuro de mi pueblo?

Como quien tiene a su lado a un padre que le descifra a su hijo amado las claves del paisaje que contempla, me ha criado el mío descubriéndome los planes que en las sombras  forjan los que se creen dioses, e investidos de inmunidad todopoderosa sujetan a esclavitud la Dignidad y Libertad de los pueblos que en ellos depositan su confianza en aras de un futuro mejor. ¿No conoce Dios los designios de quienes se creen señores del mundo? Son ciegos dirigiendo ciegos al abismo. No existe el Mal, dicen. ¡Cuanta sabiduría infusa y profusa la de ellos! Mi Rey les arrojará a la cara sus maldades, y sobre ellas reflexionarán en las sombras entre cuyas oscuridades dibujaron un  Globo en el aire, sujetos a las cuerdas de sus dedos, teniendo aterrorizados a todos los habitantes del mundo, con el corazón en un puño comprando sus vidas a cambio de la libertad sin límites reclamada por quienes mueven los hilos de la Geopolítica del Futuro.

Ha nacido el Día, la Mañana que nadie esperaba llegase, la Mañana que otros querían que llegara para ser los únicos dueños del mundo, Dios Santo, ha llegado. Tu Palabra no conoce muro, ni fuerza que detenga su vuelo por los milenios y sus siglos. El reguero de sangre que tus pueblos han dejado en el Pasado marcan el camino al Presente. Así todo el mundo sabrá de dónde venimos, y entienda a donde vamos.

Mi espíritu  ha creído en la Palabra de mi Dios: No caerá mi mundo en las sombras, no enterrarán la Dignidad del Creador en el abismo de sus  ciegos designios. Lo dejó escrito, lo selló con la sangre de su Hijo, se levantaron de Testigos sus hermanos. Como Sara e Isabel en su ancianidad rejuvenecieron para dar vida a una generación sagrada, así la Tierra reverdecerá ante los ojos de todos, y el hombre que creó Dios de su barro se hará de piedra, mármol extraído de la Roca del Espíritu del Creador.

 No volverá la Muerte a encontrar en el ser del Hombre tierra en la que sembrar su semilla maldita. Dios lo ha jurado por su Honor y Gloria: Escucha Hombre: serás hijo de Dios entre hijos de Dios, Ciudadanos entre ciudadanos  del Reino de mi Hijo, tu vida está en el Rey, tu Creador, la eternidad será la tierra que acogerá tus pies, el infinito desplegará ante tus ojos  su belleza, la Belleza del Creador de los Nuevos Cielos y la Nueva Tierra.

¡Qué puede desear el Hombre más grande que días que no se acaban nunca! ¿No sabéis interpretar la Palabra escrita en la Piedra? Se acabó el Día de quien fue liberado por Mil Años para conducir a las naciones a la Batalla de  Gog y Magog. ¿No queríais entrar en una Nueva Era? Llamadla la Segunda Era de Cristo, la Era del Rey, porque ya no habrá una Tercera.

 

 

14/12

ISRAEL, HIJO DE ABRAHAM

 

¿En qué granja, fábrica o establo se determina la naturaleza de la inteligencia de  los hombres? ¿Por qué habiendo Dios puesto a los hombres el Conocimiento de la Ciencia de la creación por límite éstos han elegido la Razón de las bestias a la Sabiduría de los hijos Dios? ¿Qué malignidad esconden las piedras para hacer que sus colores vuelvan locos mentes y corazones y no detengan sus brazos asesinos ni por padre ni por hermano ni por hijo?

La llaman Edad Moderna.

¿De verdad? ¿En qué momento salieron esos hombres de la Edad de Piedra cuando es por la posesión de las piedras que se matan, hunden a naciones enteras en el abismo del genocidio?

¡Que respondan los sumos sacerdotes del templo del Norte, todos sabios, todos divinos, todos  conjurados para hacer imposible nuestra salida de las cavernas! Sí, es verdad, las nuevas cavernas tienen luz, pero no es la solar.  Y qué bueno es que los hombres vivamos al amparo de la protección de las cuevas modernas. Los nuevos cavernícolas no saben que lo son. En ellos se cumple la máxima de la felicidad  desde muy antiguo escrita en la pared de la Ciencia : Mientras más conoce el hombre más desgraciado es, en la ignorancia está la felicidad. Sentencia lapidaria en pro del genocidio mundial que comenzando en un fratricidio ha extendido su moral de la necesaria destrucción de los débiles en aras de la supervivencia de los fuertes, todos ricos, todos poderosos, cavernícolas de oro, sin consciencia de la verdadera naturaleza criminal de sus políticas y de sus religiones, de sus ideologías y de sus  corrupciones, río caudaloso de oro negro que arrastra a todos al océano de la extinción  en los brazos de la Muerte.

¿Me ha dado Dios por límite su Omnisciencia y me voy a conformar yo con  las migajas de  la Ciencia Genocida que desde el Templo del Norte defiende sus tablas de oro,  desterrando de sus muros a todo hombre que se atreva a decir esta boca es mía? Pues que adoraron la Duda por Método, ¿por qué no dudan de sí mismos?

Yo sé porqué, me lo ha enseñado mi Dios. Son infalibles, son omnipotentes , su ciencia es absoluta, su razón es hiper divina, sin salir de la Tierra escudriñan el cosmos y le asignan edades y origen a las galaxias  que extiende las costas del Océano de la Creación hasta el Infinito.

Quien ve sus mentes  lo ve todo, buscaron la libertad para hacerse esclavos con cadenas de oro al servicio de los hijos de Satán.  ¿No lo sabéis, sabios y santos que sois todos?

Al principio le puso Dios delante al Hombre un Alma Viviente a cuya imagen y semejanza fueron formados los primeros padres de las naciones, modelo de Ser que encontró en sus propios hijos no terrestres el enemigo más feroz e infernal. Abominó Dios de aquellos hijos rebeldes y  en su Derecho de Creador los sentenció a destierro eterno de la Vida.  Adoraron el fruto de las entrañas de la Muerte, con su madre ellos se irán al Infierno.

La Sentencia firmada, el Primer Hombre en el polvo,  dos Modelos  de Ser se alzaron sobre la Tierra: Ser a la Imagen y semejanza de Satán, o  Ser a la imagen y semejanza del  hijo del Hombre. Cada cual elige su futuro en la Eternidad. Pues lo que Dios hizo,  separar la Vida de la Muerte y elevar la Vida a su Naturaleza Inmortal e Indestructible, no puede deshacerse. La elección debe hacerse. Por esto  hizo hombre a su Hijo, para que la elección naciese en el seno de nuestros padres. Pero vino la Ciencia y doblando sus rodillas ante el Ser a imagen y semejanza de Satanás metió su garra inmunda en el seno de nuestros padres para  hacer abortar la Semilla Divina en la Humanidad.

Se lavan las manos en la vasija donde Pilatos se lavó las suyas. ¿Enemigo de las ciencias? La demencia tiene nombre.

Y tú, Israel, hijo de Abraham, ¿aún esperas al Mesías al que crucificaste y por cuya muerte has pagado dos mil años de destierro? ¿Quieres que baje de su Mundo para crucificarle de nuevo?

 Despierta de tu sueño. Se acabó tu condena. El Dios de tu padre  lo juró por su gloria y lo ha cumplido, volverías a tu tierra de origen. Y ahí estás. ¿A qué esperas para doblar tus rodillas ante el Rey? Da testimonio de la Gloria del Dios de tu padre  proclamando tu adhesión a la Corona del Mesías que tu padre nos dio a todas las familias de la Tierra. Fue por el Pecado de Rebelión de tu Primer Padre, Adán, que todas las familias fuimos condenadas a vivir desterradas de Dios, abandonadas en el infierno de la Guerra que Satanás le declaró al mundo entero. ¡Cómo hubieras podido ir por los siglos gritando en voz alta que el origen de todos los males de todos los pueblos se halló en tu primer padre!

Viviste guardando silencio, tan  mudo que incluso tus padres se olvidaron de la verdadera causa por la que  Abraham levantó su brazo contra su primogénito. Ciegos, sordos y mudos llegaron tus padres al Monte de los Olivos, donde mojaron la pluma de tu Sentencia de Destierro en la sangre de Aquel en quien Dios tiene su Vida.

Ceja, Israel, hijo de Abraham, de  buscar lo que no encontrarás, de esperar lo que nunca sucederá. Dobla tu cabeza y conviértete al Rey de los Cielos. Maldice lo que amaste, bendice lo que maldijiste; regresa a la Familia de las naciones en la plenitud del Derecho de quien tiene en Dios, Padre del Rey, su  Dios. 

Y tú, Ismael, hijo de una esclava, te arrancaste el nombre del Dios de Abraham, tu padre, y te entregaste a un dios sin nombre que tiene en el Odio y la Guerra su paraíso. ¿Cuándo dejarás de odiar a Isaac? Tu odio te consume.  No quieres entender que quien le abrió las puertas de Palestina al hijo de Abraham es el Dios Creador del Cosmos. ¿Por qué no desterraste el Odio y te quedaste a convivir en la casa del primogénito de tu padre? Ahora eres un juego en las manos de quienes  tienen en Satanás su Ser. Aquellos que dicen ser tus defensores son tus enemigos infernales, no cesarán hasta verte destruido, para así en la sangre de tu genocidio alimentar el fuego del Odio del dios de tus hermanastros hacia quien el Dios de Abraham ha conducido a la tierra de sus orígenes. Rompe con quienes quieren arrojarte a la pira de su odio,  baja la cabeza, reconoce al hijo de Abraham, su heredero, su primogénito, vive en su tienda como hermano, que sus enemigos sean tus enemigos, disfruta de la leche y de la miel, de la vid y de fruto del árbol de la vida.

¡Y vosotros,  apologistas de nada y defensores de nadie!, ¿dónde están las Fuerzas de Pacificación que las naciones hemos creado para que la Guerra choque contra el muro de la Paz!

Sí, yo lo he oído de mi Padre , ¡podrá la esclava rebelarse contra los señores de las industria de la Guerra, su amo! ¿Le quitará de la mesa la esclava el pan a su amo? ¿Permitirá el amo que su esclava diga esta boca es mía?

Por esto el Rey le quitará los cimientos a la casa de la esclava, y le romperá los brazos a su amo. La Tierra entera oirá la celebración de los Cielos cuando el edificio se caiga sobre amo y esclava. Las naciones firmarán la Alianza que el Rey firmó con Dios, y pondrán sus ejércitos al servicio de su Corona, y el Rey le dará a la Paz un contra cuyos muros se estrellarán dictadores, tiranos, genocidas y fratricidas. No habrá entre los hombres quien vea llegar a su mano el pensamiento que naciera en su cabeza, antes que  la orden llegue a los dedos su brazo caerá al suelo.

¿Quiénes son estos que con una bendicen el aborto de la vida en el seno de sus padres y con la otra  defienden la muerte abominable que nace para  sembrar el fuego del odio y la guerra entre las familias de los hombres?

Hablan de Paz quienes en la Guerra tienen su Negocio, de Libertad quienes tienen en la Corrupción su vida, de Conocimiento quienes tienen en la Ciencia su Templo de Destrucción.

¿Qué es el hombre?

Imagen del Hijo de Dios, Señor de la Paz, lo es todo: semejante de Satanás, señor de la Guerra, es nada.

Por esto mis ojos no lloran  ni mi pulso tiembla cuando escribe y verá desaparecer en la niebla del olvido la existencia de quienes  despreciaron el Espíritu de hijo de Dios y agarraron las almas de las bestias como su origen y principio.

El que no se convierta al Rey de los Cielos y no doble sus rodillas ante su Corona, perecerá en su demencia. Serán polvo en las sandalias de los pueblos de Dios, que sacudiremos de nuestros pies sin mirar atrás.

¿No lo ves, hijo de Abraham? perdiste tu  primogenitura, eres un pueblo entre los pueblos de Dios, hermano entre hermanos, nuestro derecho es tu derecho, tu vida es nuestra vida. Cumple con tu destino: Da gloria al Dios de tu padre, no tengas miedo de reconocer el Pecado de tus padres, la sentencia se cumplió, la sangre del Mesías cayó sobre las cabezas de sus descendientes. Hoy eres libre, ven al encuentro de todos los pueblos de Dios, tu Creador; quien se levanta contra el hijo de Abraham se levanta contra su Creación.

 

12/12

VER PARA CREER

 

El Poder de Dios para reducir un mundo a polvo no es necesario recalcarlo una vez leída la Historia del Señor Dios YAVÉ. La pregunta existencial suprema que desde aquí abajo nos hacemos los hijos de Dios no se refiere a su Poder sino a su Paciencia. Porque sabemos que siendo ÉL el que es, el hecho de mantener la situación a que su Creación Humana fue expuesta por la Caída, nos debe plantear una sospecha firme sobre la ignorancia general del mundo respecto a la respuesta debida a dicha pregunta.

Desde que el Hombre fue abandonado a sus solas fuerzas hasta nuestros días, el pensamiento religioso, filosófico, teológico, científico  y político ha  estado dando bandazos de derecha a izquierda sin  llegar nunca a  ver el núcleo de la cuestión. Lo que pasó en la Tierra tuvo repercusiones en la Eternidad, tanto la muerte del Primer Hombre como la Resurrección del hijo del Hombre conmovieron los fundamentos de la Creación: la Vida en el Universo no podía permanecer sobre los mismos pilares, el edificio entero se había venido abajo, tocaba una Revolución Divina que le afectase a la propia Casa del Creador del Nuevo Cosmos.

El efecto de aquella causa lo conocemos. El Hijo de Dios intervino en la Historia de la Tierra para proclamar su Unidad con su Padre y fundar su Corona sobre los nuevos Pilares Políticos y Religiosos que habrán de mantener por la eternidad el Nuevo Edificio de la Vida en el Universo.

De lo  visto y transmitido a todas las naciones por la Iglesia Católica Romana se entiende la Necesidad considerada de  mostrar a la Creación entera el porqué Dios siente como Abominación Insoportable a su Espíritu el fruto de la Ciencia del bien y del mal, al punto de elevar su doctrina a la Pena de Muerte. Nunca jamás mundo alguno vio con sus ojos  el Infierno en esa fruta, porque nunca jamás mundo alguno fue criado en ese interior. Ninguno, excepto nuestro Mundo.

Como la Necesidad de la Muerte de Cristo  fue ineludible, la Necesidad de  mostrar a los Mundos creados antes del nuestro el Infierno que la Ciencia del bien y del mal expande como su fruto, esta Necesidad fue igualmente ineludible. Aquel Hijo de Dios que  subió a la Cruz era el Mismo Dios que dijo: “Haya Luz”. Y sin embargo comprendiendo esta Necesidad y  sufriendo en su Corazón el Futuro  de la Humanidad hasta su  Venida para el Juicio Final, dobló sus rodillas ante el Señor Dios Yavé, su Padre, en el convencimiento absoluto e invencible de  estar haciendo  lo único verdaderamente efectivo  para causar el Destierro de esa Ciencia de las fronteras de su Reino.

Como hijo de Dios la afirmación a su Obediencia es sólida como la Roca sobre la que fundó su Iglesia. Esto nos lleva a considerar que la Revolución Divina que nos ha sido legada en Herencia parte de aquella Necesidad, efecto de la cual fue  dejar que la Historia de las Naciones continuase su camino hasta nuestro Nacimiento.

La Alianza que en nombre de Dios y del Hombre firmó el Hijo de Dios ha mantenido viva  a la Humanidad a través de estos dos milenios; a la manera que la Alianza Antigua mantuvo viva la Casa de Abraham durante los dos milenios que  fueron desde Abraham hasta el Nacimiento del hijo del Hombre, el camino  que la Historia del Cristianismo y de la Iglesia ha dejado escrito en la Memoria de nuestros pueblos y de la Tierra ha  sido una epopeya por un campo de batalla en el que la Muerte desató su Infierno y Dios su Fuerza.

Pero la Necesidad seguía viva. “Polvo eres y al polvo volverás”  no fue una condena a un individuo, sino a un Mundo en su totalidad. Es la Historia más vieja del Cosmos. La Vida inicia su andadura, la Muerte se acerca y  conduce  el mundo creado al polvo. Una vez dos veces, tres veces, mil, un millón de veces … ¿cuántas veces vio Dios este proceso?  

De la experiencia se sacan dos cosas, sabiduría, y la sabiduría se hace ley. Cuando Dios le dice al Genero Humano en la persona de su cabeza, Adán, que  el futuro de su Mundo era ese, ser reducido a polvo, Dios no le dijo sino la Ley que  durante la Eternidad estuvo vigente a lo largo y ancho de un Cosmos,  Increado e Infinito.

¿El Poder sobre la vida y la muerte de tus semejantes te hace un dios?

¡SI, por supuesto!, un dios a la imagen y semejanza de Satán…

Pero esto es papilla para sabios en su infancia. Ya no somos niños. La Sabiduría no sólo no nos da la espalda sino que Hoy nos abraza como Madre a sus hijos.

Así como los hijos de Dios, con Origen en otros puntos de la Creación, ya no tienen necesidad de ver para creer, tampoco nosotros, hijos de Dios nacidos en la Tierra, tenemos necesidad de ver para creer. Afirmamos sin Necesidad de ver que el futuro de todo Mundo abandonado a sus solas fuerzas bajo la ley del Infierno que la Ciencia del bien y del mal  exporta a todas las naciones es su autodestrucción integral global.

Jamás Mundo alguno venció a la Muerte; su Fuerza increada estuvo sobre toda criatura desde los  principios sin Origen de la Increación. La Única Puerta a la Vida Eterna es Dios, el Vencedor de la Muerte.

Luego fue con el Vencedor que Jesucristo firmó una Alianza entre el Hombre y Dios, por la que el Rey se levantaría de su Trono, y en la Plenitud de su Gloria, y Gloria del Unigénito del Creador del Nuevo Cosmos, engendraría una Generación de hijos de Dios para quien la Necesidad de Ver dejó de ser por la Sabiduría de la Fe, y por Amor a su Casa su Corona  extendería su Paz y su Salud sobre todas las naciones de la Tierra, arrancando del Ser Humano las raíces del Árbol de la ciencia del bien y del mal.

Por esta Alianza derramó el  Mediador ente Dios y el Hombre su sangre para en su Sangre mojar la pluma con la que se selló esa una Nueva Alianza. Y Alianza Universal por la que la Plenitud de las naciones  abre los ojos a la Verdad y  proclama  su condición de Ciudadanos del Reino del Hijo de Dios por la eternidad.  

Este es el Momento Histórico en el que  actualmente nos situamos.

La Necesidad, que Dios tuvo de mostrarle a sus hijos del Cielo la naturaleza de la Ley, habiendo muerto, ha muerto igualmente para los hijos de Dios de la Tierra.  

No habrá Guerra Mundial, no habrá destrucción global de la Tierra.

Todas las enfermedades serán vencidas en este siglo, todas las dictaduras pasarán a los libros de historia ante nuestros ojos, todas las organizaciones criminales serán  desterradas de la Vida. No habrá ya más quien llore por los que se van como quien pierde lo que nunca tendrá, pues todos nos veremos en el Mundo del que vino el Hijo de Dios.

Dicho esto, nos toca mirar el Futuro  desde la Victoria.  

Los pueblos y sus naciones fueron sometidos a la ley de un infierno en el que debieron adaptarse para sobrevivir; adaptación forzosa que ha creado en ellos, como antes  lo vivieron nuestros antepasados, un comportamiento que actúa en sus mentes profundas como argollas y cadenas que los mantienen prisioneros de su Pasado, enganchados  al muro de sus  antepasados cuales esclavos a los remos del barco que ha de conducirlos al fondo del océano, que esperan vencer en la creencias  de poder ganarle la Guerra a la Muerte. Ignoran que sus dioses no son Dios, son simples amuletos de letras, iconos gráficos, un tótem dictatorial pseudorreligioso al que se agarran en la creencia de  poder superar a la Muerte.

Han sido miles de años sobreviviendo bajo la lluvia del látigo de tiranos y emperadores inhumanos que se declararon dioses para  acallar sus propias consciencias y mantener sus status de superhumanos sobre la ruina y la miseria de los pueblos. No se les puede juzgar desde la Victoria como si del Enemigo se tratase.

Nuestro Enemigo es la Muerte.  Tampoco podemos  abandonar la Batalla porque en su ceguera se levanten para detener el paso del Vencedor. Una vez que la Batalla Final ha sido declarada y Dios ha movido a su Rey los movimientos hacia la Paz Mundial y la Salud Universal son invencibles. No porque los hombres lo seamos, sino porque Aquel que es Nuestro Aliado es el Creador del Universo de todo lo que existe en el Cosmos. ¡Quién sino ÉL, Señor Dios del Infinito y la Eternidad, ha estado aguardando este Día con más deseo y pasión! ¡Quién detendrá ahora su Brazo cuando ni la misma Muerte pudo contener a su Hijo!

En efecto, baten los tambores de guerra los hijos que la Muerte le ha dado a Satán. El Monstruo Fratricida del Norte hace lo que debe, acometer el genocidio de Ucrania, la madre de Rusia, mientras en su locura infernal amenaza a la creación entera con destrucción infernal y paga a mercenarios para  lanzarse contra  Israel, el hijo de Abraham, así desviando la atención sobre sus crímenes abominables e inmundos. 

Vanas son las tinieblas que los  dictadores demócratas envían  a través de los mass media al mundo para mostrarles la limpieza de sus sepulcros. ¡Qué otra cosa hicieron los malditos de todos los tiempos sino matar y morir bailando! Corren los adoradores del dinero a poner caras de ministros incorruptibles, la sonrisa dibujada en la máscara mientras  saquean y organizan  robos desde el Poder, y para mantener el Poder de la corrupción sobre las naciones que   se declaran discapacitadas intelectuales para gobernarse a sí mismas, y delegan su Palabra  en una caja ciega que los  elegidos de los dioses  arrojan a las cisternas sobre cuyas aguas  podridas  echan a botar el barco de sus pasiones sin límites.

Esta es la Ciencia del bien y del mal. Es Ciencia, no es un cuento de viejas. Como toda Ciencia tiene sus leyes, sus principios,  su dialéctica y su lenguaje. Ofende a la inteligencia de un hijo de Dios que  esta Ciencia haya sido vetada y desterrada de la Formación Intelectual de las generaciones, a nivel nacional y a nivel mundial. ¿Hay Ciencia mayor y de más importancia para el Futuro de la Humanidad que el estudio de sus leyes y principios? ¿Porqué reducen la Formación de las generaciones al tema del Trabajo, sea académico o laboral, desterrando de la Inteligencia del Individuo  la visión de la Historia Universal a la que pertenece y en la que se desarrolla, en la que debe participar activamente, formando parte de un Mundo en crecimiento que mira a los Cielos y cultiva la Tierra con el amor, pasión y sabiduría que un hijo  abraza a su madre?

Dicen los fantasmas del Socialismo y del Capitalismo que existe Cambio Climático. ¡Cómo no! Fueron ellos, los Comunistas y los Capitalistas quienes reventaron contra el cuerpo de nuestra Madre Tierra un numero de 666 Megatones, 66.600 bombas atómicas tipo Hiroshima Nagasaki reventadas contra su cuerpo en el espacio de tiempo del 1945 al 2000.

¡Cómo no iba a afectarle ese despliegue matricida y genocida a la Biosfera!  

La cuestión es ¿qué hacen?

Europa y América arden, ¿quién ha visto a esos apóstoles del Cambio Climático  poner sobre la mesa un desarrollo de  Vigilancia de los Bosques del Planeta mediante drones controlados y dependientes de poblaciones de pastores de bosques  extendidos por los continentes como  una red de protección de la Fauna y Flora del Planeta?

Nadie ha visto nada.

Pero todos los hemos visto metiendo las manos en las Arcas Públicas para combatir un Cambio Climático al que no destinan un solo dólar, ni un euro. Su lema es transformar la batalla en un Negocio.  

¡Son tantos los negocios! Los negocios del Hambre, los negocios de las Enfermedades, los negocios de los Drogas…Para ellos todos somos un Negocio, las elecciones generales son un negocio...!

Todo se acaba. Todo tiene un tiempo.  Cuando el péndulo toca su tope, baja a velocidad doble a la que ascendiera. En esta Revolución en la que hemos entrado esa velocidad se multiplica  acorde a la Omnipotencia de Nuestro Aliado. Que yo lo disfrute y vuestros ojos lo vean.

 

 

4/12.

LA GRAN MENTIRA

 

Con el Nacimiento de Cristo entró en el mundo un a concepción del Poder en guerra sin cuartel contra el Poder hasta entonces entendido por todos los habitantes de la Tierra. El Poder era entendido como la norma Imperial. Todos los pueblos buscaron el Imperio. Los reyes fueron el fracaso de las familias patriarcales locales para elevar su trono al Imperio. Las religiones antiguas no entendían el Poder de otra manera y bendijeron el ascenso de sus reyes al Imperio, elevación que les supondría a las castas sacerdotales el consiguiente imperio de las almas. El Trono dominaría el cuerpo y el Sacerdocio el alma del pueblo. Tal fue la estructura mental de los hombres antes del Nacimiento de Cristo. El Imperio Romano entendió a la perfección esta realidad y adaptó sus ejércitos imperiales a tal fin. Nada nuevo balo el sol. Asirios, babilonios, persas, griegos, todos intentaron hacer de sus capitales la Ciudad Eterna. Todas las ciudades eternas y sus imperios cayeron y perecieron enterradas bajo el polvo de los siglos. Tal devino la condición de la inteligencia humana desde que un hermano mató a su hermano en aras del Imperio que soñó levantar.  La historia de Caín y Abel se repitió en la leyenda de Rómulo y Remo. Nada nuevo bajo el sol. El deseo de dominar a todos los hombres la muerte de quien se opusiese a este deseo el precio a pagar, sin escrúpulo ni conciencia aunque la víctima fuese el propio hermano, devino el pan de cada día de todos los que se creyeron superiores a sus vecinos, y creyeron que habían sido elegidos por los dioses para imponer su voluntad, la muerte del no creyente en su elección la puerta al Paraíso, llamase como se llamase ese infierno adorado por los elegidos de la Muerte.  

Era lo que había. El mundo no lo había hecho el César. Estaba ahí. Matabas o te mataban. Era ley universal suprema. El Poder se le arrancaba de las manos al imperio del momento como camino a la defensa de la propia vida. Quienes una vez comían del Fruto Prohibido de la Guerra ya no podían abandonar la carretera a la gloria, a costa de ser el infierno para todos quienes se cruzasen en su camino. Gloria efímera, pero gloria al fin y al cabo.

El futuro de las Civilización se había escrito con sangre. Tardase un siglo, dos siglos, tres siglos, cuatro o cinco, una Civilización edificada sobre una Tierra ensangrentada un día se transformaría en un mar de arenas movedizas; el peso de sus maldades acabaría hundiendo todo el edificio, tragado por su propio Pasado, para no regresar jamás de la tumba. La Gran Babilonia de los Asirios, Babilonios, Caldeos,  Egipcios, Persas, Griegos, Romanos… había resistido el paso de los milenios. Cada ve que la Gran Babilonia, fundada por Satán, para  conducir a todas las naciones al abismo de su extinción, cada vez que aquella Gran Babilonia resurgía de sus cenizas la naturaleza inhumana creció con ella.

Cuando Cristo nació la vida humana era carne con la que reyes y emperadores alimentaban a sus fieras, en sus palacios y circos. Los Romanos no inventaron nada nuevo; aplicaron la ley universal llevando al extremo su inhumanidad. El Poder no estaba para servir al Hombre, el Poder se conquistaba para destruir a todos quienes se opusiesen a la gloria del César. En ese momento, la vida humana al borde del precipicio al que habían sido conducidas las naciones, interviene Dios en Persona en la Historia de la Tierra para  salvar al género humano de caer en el precipicio del bestialismo absoluto y reconducir su Historia hacia un Nuevo Futuro. Nace el Cristianismo. El Cristiano hereda la mente de Cristo, tienen el pensamiento de Cristo. La Semilla que Dios siembra en los hombres crece a velocidad vertiginosa, tan grande es su crecimiento que el César lo declara su enemigo desde el momento que penetra en el Pensamiento Cristiano y entiende que el Futuro del Poder, según el Cristo,  es el servicio a todos los hombres, no el Dominio sobre todos los pueblos. El Poder existe para en Nombre de su Creador servir a los hombres. Virus maligno, evidentemente, contra el que el Imperio se alza en guerra. Los esclavos sirven, los amos dominan. ¿Qué locura era la de los Cristianos? Un mundo en el que ese Pensamiento fuese Ley Natural podría hablarse de esa manera; pero en un mundo en el que la Ley era la espada y el fuego darle alas a ese Pensamiento sería quedarse desnudo, invitar que el  vecino a que  te hincase la lanza en el pecho y te abriese de cuajo corazón. Así que los Cristianos debían morir, ser sacrificados en aras de la supervivencia del Imperio. Y el Poder permaneció en su palacio de la mente afirmando cada vez con ,as fuerza su naturaleza de Amo y Dominador de los hombres.

El Cristianismo devino una Utopía. Todos hermanos, todos hijos de Dios, todos una Familia de Naciones viviendo a la luz de una Paz Universal, establecida sobre una Justicia emanante del Espíritu del Padre Creador, su Raíz la Verdad, su Fruto la Libertad. En esta Civilización derrama Dios su Omnisciencia haciendo crecer la Inteligencia de todos los pueblos, todos Ciudadanos del Reino de su Hijo, quien sirve a Dios con el Todopoder de su Corona. Quien es Todopoderoso por Naturaleza Divina se hace Siervo de todos los pueblos deviniendo la Columna Indestructible que les garantiza a todos la Felicidad. ¡Un sueño! ¡Una Visión del Futuro de la Vida en el Universo  acorde a su Creador!

Curiosamente ese Ser Todopoderoso, quien con cuya Palabra creó todo lo que vemos en los Cielos y en la Tierra, JESÚS, el HIJO DE DIOS, baja la cabeza y pone su Brazo al Servicio de su Padre, YAVÉ DIOS. JESÚS descubre en CRISTO la Encarnación del Pensamiento de su PADRE sobre la naturaleza del Poder de un Estado Universal del que dependerá el Futuro de la Civilización de Su Reino. Él,  JESÚS, puede establecer su Corona sobre el Terror a su  Brazo Todopoderoso, o fundar su Trono sobre el Amor a la Verdad, la Justicia y las Paz, en una palabra, la Vida.

El Cristo es Siervo de Dios, Encarnación Viva del Pensamiento del Señor Dios YAVÉ sobre la Naturaleza de Su Relación con el Creador del Universo con su Creación. El Rey de los Cielos sirve a YAVÉ Dios para la Felicidad de todos los Mundos, teniendo toda criatura en su Brazo la Garantía Eterna de la Invencibilidad de la Paz, que con su Corona sostiene, y con su Sabiduría alimenta.

 El Poder no lo da Dios para dominar a los pueblos, sino para servir a las naciones de Su Creación.

Este es el Pensamiento de Dios, que se hace Hombre, deviene el Pensamiento de Cristo, y heredan sus Apóstoles. Éstos le edifican a este Pensamiento un Templo, desde donde se Pensamiento se extiende por todos los pueblos. El Imperio se cristianiza. La Iglesia mantiene con el Estado la relación divina establecida por su Fundador : “Al Cesar lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”. A la Iglesia el espíritu, y al Estado el cuerpo. Porque si el Primer Hombre fue creado Alma Viviente, el Hombre Nuevo que Dios engendra es espíritu vivificante que vive la Palabra de Cristo, en la que tiene la fuente de su Moral y Ley de su Comportamiento.

Sin embargo este Edificio fundado por Dios en Persona se vería atacado con toda la fuerza de la Muerte. Con sus palabras pero con claridad lo dijo y los acontecimientos le dieron la Razón. Su Iglesia se vería asediada por terremotos sociales incesantes contra los cuales su Victoria sería la manifestación visible de la Divinidad de su Fundador. Romanos, Herejes, Musulmanes, Filósofos y Científicos, Reyes y Reformadores, Políticos y Tiranos, Teócratas y Dictadores, las fuerzas que la Muerte y su Príncipe desataron sobre la Santa Madre Iglesia Católica fue constante, incesante y mortal de necesidad una vez tras otra. Abierto este campo de batalla por su Supervivencia la Instauración del Reino de su Señor sobre la plenitud de las naciones seguiría siendo una Utopía, provocando esta frustración la demencia que vivimos en las Guerras Mundiales.

Pero no es Dios un Padre que abandone a sus hijos a su suerte, y por esto escribió su Apóstol: “La creación entera aguarda angustiada la gloria de la libertad de los hijos de Dios”. Hijos de Dios, hijos de Cristo, el Testador, Herederos de su testamento, a cuya Descendencia legó la Promesa Divina de Invencibilidad contra todos sus enemigos. Diciendo lo cual  abre la Inteligencia a la naturaleza del siglo en el que este Día nace para hacer bajar del Cielo el Reino del su Padre que está en los Cielos. La Batalla Final, pues, ha comenzado. La Ley de la Muerte va a ser abolida, y la Ley de la Vida  extenderá sobre todas las naciones su Salud y su Paz.

No será por la espada y el fuego, sino por la verdad y la Justicia que las naciones  en su Plenitud se adherirán a la Ciudadanía del Reino del Hijo de Dios. La Nueva Alianza, por la que Dios deviene Rey, vivirá para siempre. La Muerte será desterrada del Género Humano, su Árbol será  echado abajo y sus raíces serán quemadas para no resurgir nunca jamás en el Hombre. La Verdad, la Justicia y la Paz engendrarán la Libertad, la Igualdad y la Fraternidad entre todos los pueblos de la Creación. El Poder estará al Servicio del Cultivo del Árbol de la  del Vida. Del Poder delegado en los hombres y los hijos de Fios sirve al Rey Divino, cualquier  desviación hacia una entidad física o jurídica es Corrupción, y la Corrupción, la lección de la Historia Universal es rotunda, conduce a aquel Mundo en el que unos grupos usaban el Poder de los Estados para imponer su ley a los pueblos, quienes perdiendo su Libertad devinieron esclavos de ese Poder cuya causa era blindarse contra la Justicia y  corromper la Ley de manera que su Libertad para cometer delito fuese sin límites. Camino por el que las naciones fueron arrastradas a las Guerras Mundiales del Siglo XX. Y si alguien cree que poniendo en escena las mismas causas que condujeron a una nación a una guerra civil no se sucederán los mismos efectos, ese es un demente. Tan demente él como quienes se sirven de su demencia para hacerse ricos mientras  se cumple su tiempo. La Nación se levantará y juzgará la cabeza y el cuerpo. Porque el tiempo de los dictadores y de los tiranos ha legado a su fin. La Noche ha pasado. El Día por el que los hijos de Dios, de la Casa de Abraham, dieron su vida, ese Día ha amanecido.

La Democracia de los Tiranos no existe. El invento de finales del Siglo XX, manipular la Democracia para desde dentro abolir su Constitución y darle a la Tiranía del Socialismo del Siglo XXI un cuerpo constitucional legítimo, es la Gran Mentira. Venezuela es el ejemplo visible y sangriento de la demencia a la que conduce el Poder al servicio de un grupo de individuos enloquecidos por la del Impunidad del Poder, con la connivencia del Estado, para saquear el Tesoro Público.

Los acontecimientos de esta Década demostrarán que donde esperaban obtener en el 2030 una Tiranía Global, formada por una Alianza de Tiranos, Dictadores, Teócratas, estados Terroristas, la Banca Mundial y las Industrias Transnacionales que viven de la Muerte de los hombres, esta Alianza Homicida y Genocida de Civilizaciones se desnucará partiéndose la frente contra el Muro Todopoderoso Casa del Rey de los Cielos. Tanta locura es retar a Dios como a su Hijo.

Esperanza, pues, donde hay batalla hay victoria. Siendo la Victoria la Herencia de los hijos del Rey de los Cielos, nadie tenga miedo, los cobarde son heredarán el Reino de Dios.

 

 

3/12

LA BANDERA DEL ARCOIRIS

 

¿Hay mayor tiranía, despotismo, malignidad, y ejercicio de dictadura que cerrarle la boca a quienes desde las entrañas de sus padres piden la voz? Desde que la Historia del Hombre comenzó a ser escrita nuestra vida estuvo a los pies de reyes, emperadores, duques, condes … todos asesinos, todos criminales, todos enemigos de la Humanidad, su único propósito ser iguales a los dioses, blindados contra sus crímenes, inmunes a la llamada del brazo de la justicia… semejantes a Dios según la idea concebida por aquella misma Serpiente que le inyectó el veneno de su demencia al Hombre. ¿Casualidad que la Mujer fuese el caballo de troya con el que el príncipe de la Muerte derrumbó el Mundo del Primer Hombre, y Hoy veamos a ese mismo caballo de troya echando abajo a fuerza de coces del Feminismo los muros que el Nuevo Hombre le levantó a la Civilización para que ninguna fuerza privarla de su Futuro? Cuando luchábamos por la Anulación de toda Inmunidad Política nos viene el Feminismo Anticristiano a consagrar para ellas ese Privilegio que los reyes, emperadores y sus cortes  gozaron durante miles de años. Ellas quieren gozar de las moles de esa fruta maldita. Las queríamos a nuestro lado, a la Mujer, y ella  quiere al Hombre enterrado en la cárcel de su Odio al Varón creado a la imagen y semejanza de los hijos de Dios. Los sucesores de aquella raza de asesinos y criminales que  conquistaron para ellos lo que Dios no le concedió a Satán, haciendo éstos de los Parlamentos el palacios de los nuevos dioses, invocaron a la mujer para compartir la fruta con ellos la fruta prohibida del Poder más allá de la Ley y de la Justicia. Como Ayer, la Mujer ha vuelto Hoy a caer rendida ante la Tentación  del Poder. Mas a diferencia de Ayer el Hombre de Hoy no es el Hombre de Ayer; tanto los discípulos de aquellos hijos de Dios que desde el Poder legítimamente concedido buscaron aplastar la Constitución Divina a fin de  Blindarse contra la Justicia  Universal, tanto esta Escuela Socialista Maligna como la Mujer tentada por el Poder sin límites responderán de sus Delitos ante la Ley; el Brazo de la Justicia hará caer los muros de acero tras el que se han blindado unos y otras, para hacerles pagar los efectos de su Caída en la Tentación: hacer del Poder Legítimo una Palanca a la Tiranía  del Socialismo del Siglo XXI.

¿Qué se podía esperar, quien mata a su hijo en las entrañas que corazón tendrá para el hijo de sus vecinos?

La Crueldad ha sido elevada a su más alta deformidad: cuando una Sociedad corrige sus crímenes cometiendo el genocidio en masa de las generaciones que piden paso, que quieren hablar, que traen la sangre nueva que fortifica el cuerpo social de la Civilización, esa Sociedad camina indefectiblemente a su extinción. El Amor a la Vida es  la Propiedad Existencial que levantó en  la Tierra al Ser Humano. Las escuelas anticristianas, de todo tipo: religiosas, políticas y científicas, han buscado, buscaron miles de formas de negar esta Verdad Inmortal: El Hombre es el fruto del Amor a la Vida; cuando este Amor  es atacado en nombre de una Sociedad que utiliza la política del loco, cortar el cuello para  acabar con el dolor de cabeza, una Sociedad que no quiere  entrar en la verdadera causa de la necesidad circunstancial de una interrupción del neonato humano, es una Sociedad que se condena a sí misma a la Inhumanidad, preludio de su extinción total, respuesta a la Abolición de esa Propiedad Existencial Única que engendró en el Homo Sapiens al Primer Hombre.

Destruir al Hombre es la estrella maligna que guía al Socialismo Feminista Anticristiano Occidental. Donde Dios y la Naturaleza engendraron el Amor a la Vida, ese Movimiento ha adoptado el Odio al Hombre Cristiano por Bandera  y Credo. La destrucción del Hombre engendrado a la imagen y semejanza del hijo de Dios es el Muro que separa a esa Organización de disfrutar de la gloria de los dioses a imagen y semejanza de los demonios, crear un olimpo reservado para élites cuyas paredes serán Inmunes contra sus delitos y crímenes. ¿En vano llamaron “palacio de los dioses” al Nuevo Parlamento Europeo?

Es desde ese Parlamento, desde la ONU y desde esferas de Poder no Occidentales que se ha impuesto el Odio a la Vida como la fuerza existencial natural al Progreso, es decir : Destruir las generaciones en el seno de sus padres, enterrar la Voz del Futuro bajo los pies de esa Alianza de Civilizaciones que ha llamado a la Mujer a comer del Maravilloso Fruto Prohibido, ser diosas. ¡Qué acto de crueldad más  infernal puede concebirse que  invitar a las mujeres a la destrucción de los seres humanos en las entrañas de sus padres, clavar en sus cuerpos el puñal del Progreso, que no hablen, que no se expresen, no tienen derecho a la vida, la mujer es dios, tiene el Poder sobre la Muerte de los hijos que la Vida siembra en la tierra fértil de sus entrañas!.

La Mujer transformada en un monstruo al servicio de quienes han adoptado por política de Progreso cortar el cuello ara acabar con el dolor de Cabeza.

La última guerra mundial se llevó 100 millones de seres humanos. ¿Cuantas decenas de millones de vidas humanas son destruidas cada día por quienes deciden cerrarle a Futuro de sus entrañas?

 Como Ayer, la Mujer de Hoy sigue siendo el caballo de troya contra el Hombre.

No quieren creerlo. El mismo Señor Dios que creó nuestros Cielos y nuestra Tierra había ya creado otros Mundos antes de la creación del nuestro. Los príncipes de esos Mundos Extraterrestres participaron en la Formación de la Primera Civilización que Dios hizo surgir entre las primeras familias de los hombres, sobre cuyas familias hizo Dios bajar del Cielo la Corona que había de posarse en un hijo suyo, hijo de hombre y mujer, tal cual  así fue, la Corona que bajó del Cielo se posó en la cabeza de Adán, hijo de Dios; contra ese Adán se levantaron para matarlo una parte de aquellos príncipes no de nuestra Tierra, y haciéndolo le declararon la guerra al mismísimo Señor de la Eternidad y del Infinito, YAVÉ DIOS. La Traición, tal cual ya está escrito en la HISTORIA DIVINA DE JESÚS, una vez consumada impuso al Traidor la Necesidad de liberarse de la Sentencia de Destierro destrucción del Género Humano mediante. De no haber hombre que pariera de la mujer ese hijo que habría de aplastarle la cabeza, ¡qué! Huir hacia adelante es el destino de quien hace del delito su  estrella. Cómo hacer que la descendencia de Adán muriese en el seno de los hijos de Eva devino el horizonte del pensamiento del príncipe del Infierno. La Historia del Antiguo Testamento es la Prueba irrefutable de dicha Necesidad.

Buscando la salvación propia, y conociendo a Dios, pues hijos de Dios fueron, sabiendo que el Espíritu Santo de Dios  no puede soportar la Ley de la Ciencia del Bien y del Mal, aquellos hijos de Dios, no de nuestro Mundo, hundieron a los pueblos nacidos de la ruptura del reino de Adán en una condición depredadora indigna incluso de las bestias más salvajes que habitaron la Tierra. Libre para hacer su voluntad, el Jefe de los príncipes del Infierno arrastró a los pueblos humanos a hacerse abominables a los ojos del Creador de Cielos y Tierra. Las ciudades de muy antiguo se entregaron a la violencia, al crimen, a la  guerra. Los hombres dejaron de ser hombres, las mujeres dejaron de ser mujeres. El Acto Universal en el que la Creación entera descubrimos en la Naturaleza del Amor a nuestros hijos al Padre en Dios y la Fuerza de su Amor por su Criatura, nosotros, el Acto de la Procreación  fue alienado del Amor a la Vida para ser encadenado al Sexo como instinto animal sin fin divino natural. ¡Más sabio es el diablo por viejo que por sabio! Los descendientes de las familias que  crearon las primeras ciudades del reino del Primer Hombre perdieron lo que hace al Hombre: El Amor a la Vida.

Y YAVÉ DIOS, como quien baja la cabeza delante de quien le ha ganado la batalla, tomó la decisión de seguirle la corriente al demente que osó usar al Padre en Dios contra el Creador en ÉL, el Señor del Infinito y de la Eternidad. ¡Cómo solar siquiera  en introducirse en la Mente de este Creador del Cosmos y adivinar hasta su ultimo pensamiento!

Si por viejo el Enemigo de su Reino era sabio, ¡qué limites, extensión, densidad y profundidad, tendrá la Sabiduría de quien cuenta su Edad por eternidades!

DIOS guardó Silencio. Su decisión estaba tomada.

Decidido a  hacer lo que como Señor de la Eternidad debía hacer, abrió Dios las ventanas del firmamento, los vientos solares  invadieron la Ionosfera, recorrieron la Biosfera y el agua del Diluvio se hizo. Levantada el Arca de Noé sobre las aguas, separó Dios la placa europeo de la africana levantó, derrumbó las columnas de Hércules, la tsunamis atlántica penetró en el Lago Mediterráneo hundiendo islas, creando terremotos y volcanes,  enterró en sus arenas el norte de África, y se abalanzó sobre el Oriente Medio, cuna de Adán, hasta  arrastrar el Arca de Noé más allá del Jordán. Navegando por aquel mar creado por el Diluvio, arrastrado por la ola que hundió la Atlántida, el Arca hubiera sido depositada  en las llanuras iranias, pero quien  creó el Cuerpo Geofísico de la Tierra abrió la tierra entre Egipto y Arabia, y entre Arabia y Irán, por cuyos corredores las aguas del Océano Índico penetraron en la Meseta Irania, arrastrando hacia el Norte a Noé y las familias que acompañaron a sus hijos. Hasta depositar Fios el Arca de su Hombre en el Monte Ararat.

Aquella generación de hijos rebeldes, los dioses de muy antiguo, cantaron victoria, porque el ser humano había sido destruido; habían jugado con los sentimientos del Espíritu del Creador como se mueve un guiñol a las órdenes de las manos  del titiritero, ya podrían bailar el baile de los malditos que acababan de escapado a su destino: el Destierro de la Creación, encerrado en el vientre del Infimito por la Eternidad, de cuyas Tinieblas ya no regresarían jamás de los jamases, jamás. 

Y sin embargo Dios no conoció ninguna Derrota. Cuando se esperaba que, vencido, aboliese la Ley que les prohibía  a todos sus hijos darse el status quo de quienes viven un olimpo de dioses inmunes contra la Justicia del Dios de los dioses,  abriendo su Boca le juró a Noé, por su Honor y Gloria que … “ciertamente os demandaré vuestra sangre, que es vuestra vida: de mano de cualquier viviente la reclamaré, como la demandaré de mano del hombre, extraño o deudo, pidiendo cuentas de la vida humana”.

En lugar de rendirse, Dios mantuvo el Decreto de Destierro contra el Homicida y Traidor a su Voluntad. Recordemos: “Pongo perpetua enemistad entre ti y la mujer, y entre tu linaje y el suyo; éste te aplastará la cabeza, y tú le acecharás el calcañal”.

Dios no renunciaba ni a Venganza, ni a Redención. El Redentor y Vengador nacería de las entrañas de ese Noé.

Lo cual no quiere decir que Satán dejase de buscar nuevas formas de hacer al hombre abominable a los ojos de Dios. La Sentencia lo decía todo: “Tú le acecharás el calcañal”, y aun así ; “el hijo del Hombre te aplastará la cabeza”.

Seguimos la Historia de la Casa de Noé hasta la de Abraham y desde Abraham a Israel y sus hijos contemplando como quien viviendo a la sombra de una Sentencia de Destierro Eterno del paraíso y la Creación de Dios no paraba de buscar la destrucción de quien había de nacer, para con su Voz darle vida al Grito de Victoria de la Casa de Noé.

Los acontecimientos están escritos. Cuando el hijo del Hombre, hijo de Eva, madre de María de Nazaret, hija de Salomón… cuando el Redentor del Mundo y Vengador de la sangre de su padre Adán nació ya no quedaba en el mundo hombre bueno en cuyo brazo reposar Dios la Maza con la que su Siervo le aplastaría la cabeza a la Serpiente Antigua.

¿Derrotar a Dios? ¡Qué locura es esta! Sin solución la redención por en cuanto quien  engañó a la Mujer y mató al Primer Hombre había sido testigo de la Creación de nuestros Cielos y de nuestra Tierra. Por el Amor del Creador a su creación somos hijos de Dios. De aquí a creerse increados, nacidos de la misma Naturaleza Divina del Señor del Infinito y de la Eternidad, por el camino surge la demencia. Dios es Padre Verdadero, tiene un Hijo Verdadero, su Unigénito, JESÚS, en el Hecho de ser este JESÚS su Primogénito la Creación entera hallamos en Dios a nuestro Padre. Dios no tiene necesidad de mentirse a Sí Mismo. La Primogenitura de su Unigénito es Veraz. El Amor que le tiene a su Unigénito es el Amor que se extiende sobre la Casa entera de su Primogénito. Por el Amor vivimos y por el Amor  gozamos de la Gloria de la Libertad de los hijos de Dios. Ahora bien, nadie se confunda, el Espíritu que vive en Dios, Padre y Creador, es Santo. En efecto, Dios no puede destetar su Espíritu de su Ser. SU Declaración para la Eternidad sobre la Naturaleza de su Personalidad Íntima está escrita: “YO SOY QUIEN SOY”. Declaración a la que  la Creación responde: “YO soy lo que soy”, un puñado de polvo de estrella sobre la que el  Creador Divino extendió el Aliento de la Vida Eterna que vive en Él. En el Amor lo tenemos todo en Dios; en el Temor a perder este Amor la sabiduría.

Así pues, la locura se apoderó de un puñado de polvo de estrellas sobre el que el Creador del Cosmos respiró su Aliento de vida eterna. Y una vez dado el paso final de la Traición escapar de la horca le era impensable al Traidor. La Victoria del hijo del Hombre selló con la Sangre del Hijo de Dios la Sentencia  dada por su Padre: Destierro Eterno de la Creación, ser arrojado al Abismo cubierto por las Tinieblas, Cementerio del Cosmos Antiguo, el piso de cuya Tumba abre su boca al Infinito.

Mas las cosas no son tan sencillas como  puede parecerle a quien  no tiene  el Pensamiento de Jesucristo. Dictada la Liberación del Maligno para el principio del Segundo Milenio de nuestra Era, una vez liberado en la Tierra, quien se había mantenido oculto bajo nombres de dioses paganos a lo largo de los milenios, tras la Victoria del hijo del Hombre se hizo el “dios escondido”, a fin de, qdesde las sombras de su abominable mente, destruir la Fundación del Hijo de Dios : la Iglesia Católica, Heredera del Testamento de su Señor, su Esposo, si gloria:  Ser la Madre de Su Descendencia, en cuyo espíritu  se haría carne la Promesa del Señor Dios a la Descendencia de su Hijo: “Se apoderarán de las puertas de sus enemigos”.

El mismo “dios escondido” que buscó enterrar a nuestros padres antiguos bajo las aguas de aquel Diluvio, se entregó a la destrucción de Nuestra Madre a fin de hacer abortar en sus entrañas la Descendencia de su Señor. Y la División de las iglesias se hizo. Las fuerzas del “dios escondido”, de nombre Satán, la Serpiente Antigua, el Dragón que aterrorizó el Paraíso de Dios durante los Días de la Creación de los Mundos,  creyó poder enterrar la Descendencia del Señor enterrando sus cuerpos en la tumba donde enterraría, bajo los fuegos infernales fratricidas de la Guerra de los Treinta Años, a la Madre en cuya Alma vivían los hijos de su Señor.

¿Vencer a Dios? ¿Cayeron los muros de la Casa construida por el Rey de los Cielos? Resistió diluvios, terremotos,  maremotos, guerras civiles internas, sobrevivió a la guerra de los Treinta años, o guerra de todos contra Ella. ¿Quiénes quieren manchar su gloria arrojando contra su Rostro la naturaleza de sus crímenes? Lo que no pudo el Príncipe delas Tinieblas, yendo de la Mano de su madre, la Muerte, ¿quieren conseguirlo sus adoradores, nacidos de macho y hembra de la especie humana?

Es la ley de la ciencia del bien y del mal, “no obtengo el bien que quiero, sino el mal que no quiero”. La Crisis anticatólica cambió de forma tras la derrota de los siervos del Sembrador Maligno. Es la vieja historia de los siglos. El hijo del vencido recoge la espada del perdedor en la creencia suicida de ser más fuerte y poderoso que el padre que perdió. Siguiendo esta ley suicida la Filosofía parió el Neo-Ateísmo. Necios, hijos de bárbaros, ¿detrás de qué máscara mejor podía esconder su verdadero objetivo el rey del Infierno? ¡¡Dios no existe!!

Como Ayer, Hoy, el Enemigo de Dios tiene un único camino para destruir al Hombre, hacernos abominables a los ojos de nuestro Creador.

Mientras el Cristiano viva en el Mundo la destrucción de la Vida en la Tierra no podrá consumarse.

Había que matar en las entrañas a los hijos del Señor, hacer abortar a la Madre en cuyas entrañas ha vivido la Promesa de Dios a la Descendencia de su Hijo: “Se apoderarán de las puertas de sus enemigos”.

Y aquí estamos.

La Ley del Creador es eterna: “Maldito todo el que derrame sangre”, y si maldito el asesino de su hermano ¡qué maldición caerá sobre quien asesina a su hijo en las entrañas!

Curioso es por tasto que quienes han abominado de la Ley de las Procreación, Reproducción y Multiplicación del Género Humano se envuelvan en el Arcoiris como bandera, en  Reto público y visible a Dios, a la manera que lo retara Satán y su generación rebelde.

“Ved, yo voy a establecer mi alianza con vosotros y con vuestra descendencia después de vosotros; y con todo ser viviente que está con vosotros, aves, ganados y fieras de la tierra, todos los salidos con vosotros del arca. Hago pacto con vosotros de no volver a exterminar a todo viviente por las aguas de un diluvio y de que no habrá ya más un diluvio que destruya la tierra,” Y añadió Dios: “Ved aquí la señal del pacto que establezco entre mí y vosotros, y cuantos vivientes están con vosotros, por generaciones sempiternas: pongo mi arco en las nubes para señal de mi pacto con la tierra, y cuando cubriere yo de nubes la tierra, aparecerá el arco y me acordaré de mi pacto con vosotros, y con todo viviente, y con toda carne, y no volverán más las aguas del diluvio a destruir toda carne. Estará el arco en las nubes, y yo lo veré, para acordarme de mi pacto eterno entre Dios y toda alma viviente y toda carne que hay sobre la tierra”.

De la misma manera que retó el Sembrador Maligno, padre de toda Mentira, al Señor Dios del Universo, a ejecutar la Sentencia contra la Transgresión de su hijo Menor Adán, confiando en que por Amor a su hijo abriese la puerta de la Corrupción, así esta generación de engañados a muerte se burlan de Dios refregándole contra su Rostro su propia Palabra; transformados en una abominación a sus ojos, ¿dirá Dios Hoy SÍ donde Ayer dijo NO?

La Corrupción, se entiende de las lecciones de la Historia Divina del Hombre, es la traición de la la Palabra emitida y escrita, haciendo de las Leyes una burla y de la Justicia una ramera que se compra y se vende.

La Incorruptibilidad se halla en la Elevación de la Ley escrita a la naturaleza de la Palabra Divina, en cuya Naturaleza tiene la Creación entera la Garantía Infinita de su Vida Eterna en una Civilización fundada sobre la Verdad Universal, a la luz de cuya Realidad viven todos los Seres, independientemente de su Origen y Principio en el Espacio y el Tiempo, garantía vacía y estéril si el Juez que hace la Ley transformase  su palabra en una hoja movida por el viento de los intereses personales de sus hijos.

Creados a Imagen y Semejanza de Dios, la traición a la palabra por parte de un hombre, palabra que le lleva a una situación de Poder con el fin personal de  hacer de su palabra el Poder,  esta traición   abre abre la puerta a una Corrupción Absoluta, contra la que todos los hombres tienen el Derecho y el Deber de levantarse a vida o muerte por su Libertad y Civilización, o sufrir la tiranía de un Poder que hace de la Justicia su ramera, de la Ley su látigo asesino contra asesino de la Libertad.

El Hombre sin Libertad es un gusano que se arrastra sobre los despojos de los muertos devorados por ese mismo Poder que le privó de Libertad más sagrada que existe: La PALABRA. Pues siendo la Palabra de Dios: Dios, y habiendo sido creado el Hombre a su imagen y semejanza, en la Palabra del Hombre está su Vida.  

Quien traiciona su palabra convirtiéndola en una llave que le abre la puerta del Poder, para hacer de ese Poder  la palanca que hará de su palabra el verdadero Poder, ese hombre  ha elegido entre la Imagen del Hijo de Dios y Satán al Homicida Inmundo y Abominable, condenado a Destierro Eterno de la Vida, camino al que esa llave, que habría de llevarle a la gloria de la Dictadura de su Voluntad, le conducirá irremediablemente.

Efectivamente, si el hombre que no sabe morir por la Libertad de su Casa es un despojo humano cuya visión es una abominación a la creación entera. ¿qué será quien somete a una nación a  ponerse de rodillas o perecer en respuesta a la  no sumisión a su voluntad? ¿Quienes se aliarán con este Traidor a su propia Palabra, habiendo de la Naturaleza Divina que en el Hombre vive una quijada de asno, si no sus semejantes, todos corruptos, todos traidores  a su palabra, enemigos de la Libertad y de la Palabra como Propiedad Existencial Divina del Hombre? Como aquel Satanás que se vistió de ángel de luz para engañar a la Mujer, sus discípulos  se visten con las galas de los mass media para vestir la peor de las traiciones concebibles, la traición a la propia palabra, de Progreso y de Civilización.

Ahora bien, una Civilización con las puertas abiertas a la Traición de la Palabra es un mundo que se hunde en  las arenas movedizas de la Corrupción, y que  chapotea miserablemente en agonía mortal cuando tuvo toda la fuerza de alzarse contra  quienes lo condujeron  a su ruina y desolación. Por esto dijo Dios: “Fuera Cobardes” .

La Creación de una Civilización Universal  formada por Pueblos creados en puntos distintos en el Espacio y el Tiempo únicamente puede subsistir en la Vida Eterna, y Progresar hasta el infinito en el Conocimiento de ciencias creadoras sin número, sobre unos fundamentos establecidos por un Poder cuya Incorruptibilidad hacen de la Ley y la Justicia los pilares de su Paz.  La Imposibilidad de la Corrupción de este Poder Universal se alza como Reino de la Libertad para hozo y felicidad de todos sus Ciudadanos independientemente de sus Orígenes en las estrellas. Pues del mismo Creador de todos viene el Espíritu de todos,  edificando en todos un único concepto de Libertad, y Felicidad.  Una única Sabiduría Universal y Eterna, que vive en el Creador Divino de todos, construye desde la Omnisciencia Creadora el Futuro de la Civilización, alimentando toda Vida desde el Corazón del que se declara Padre de todos los Ciudadanos de su Reino.

La Ley de la Creación viene de Dios, y entra en conflicto con la ley humana desde el momento en que se declara en rebelión contra esta Civilización que viene de Dios, del Cielo según los Antiguos. En nuestro caso, cuando la Ley Civil puso bajo a la Ley Natural bajo las botas de los reyes, y de los poderes económicos globales el conflicto se abrió, dejando entrar en las naciones la corrupción como modus vivendi del Poderoso y del Rico. Este status quo debería proceder a la Dictadura de sus miembros, aliados en una Ideología Anticristiana efecto de la cual habría de ser la  Extinción de la Imagen de Dios en el Hombre. Sabiendo que este efecto habría de provocar en Dios  la respuesta que le diera al mundo de Noé, en nuestros días esa Alianza de Civilizaciones patrocinada por la ONU, financiada por los reyes del mundo, han levantado como bandera el Arco sobre el que Dios juró no destruir al hombre mediante las aguas de un Diluvio. La demencia de aquella Serpiente que la Muerte incubó en quienes fueron un día hijos de Dios, bajo cuya fuerza suicida creyeron poder  vencer a Dios, se ha transmitido a esa Alianza de Civilizaciones cuya Agenda tiene por Norte la Desaparición del Cristianismo y la elevación de sus miembros a una Federación de Naciones unidas en un mismo espíritu de Defensa de su Titranía Global.

 La cuestión  viene por sí sola: ¿Qué necesidad tiene Dios de hacer perecer toda vida en la Tierra si esa Alianza ya se ha encargado de proceder a la destrucción de todas las fuerzas que las integran?

La Palabra es Dios, el Hombre ha sido engendrado a la Imagen y Semejanza de Dios, en la Palabra del Hombre vive esa Imagen y Semejanza que le hace ser Familia de su Creador, y Ciudadano de su Reino Universal Sempiterno.

El hombre en quien no vive esta Palabra en su Naturaleza Divina, y hace de su palabra lo que las garras y los colmillos son a una bestia salvaje, libremente destierra de su ser la Humanidad, elige ser una bestia que desgarra y destroza a todo el que se opone a su voluntad, a cuyo servicio tiene todo el Poder del Estado que ha corrompido hasta abrirle la puerta a su disolución.

Quienes no abandonen ese barco se hundirán en las profundidades de sus delitos. Pues así ha ducho Dios;: "Hijo de hombre, dile al que comete delito que va a morir, si te escucha habrá salvado su alma, si no te escucha su muerte caiga sobre su cabeza, pero si te callas su delito será sobre la tuya". Palabra para los siervos y para todos los hijos de Dios.    

 

 

30 /11

 

¿Quién fue el criminal que inventó el Dinero? ¿Quiénes fueron los miserables que inventaron el negocio de la usura, origen de las asociaciones criminales llamados Bancos? ¿Cuál fue la intención homicida detrás de la invención del Dinero y de los Bancos? Y lo que es absolutamente vital : ¿Cómo sanar el cuerpo de la plenitud de las naciones de este virus maligno que lleva sacrificando pueblos a su supervivencia genocida? ¿Cómo liberar al Género Humano de esta demencia que se ha instalado como sabiduría en su inteligencia, esclavizando el futuro de todos los hombres a la permanencia de instituciones malignas creadas a base de fuego y sangre por los apóstoles de la Necesidad de la Existencia del Dinero y de los Bancos?

Si el Comunismo es un Cáncer sin solución, de cuya  patología únicamente puede liberarse una nación mediante la desaparición de su Estado y la creación de un Nuevo Estado No-Socialista basado en las leyes del Espíritu de la Creación, el origen del Comunismo está en la ley de la Ciencia del Bien y del Mal, es decir, no hubiese  habido nacimiento del monstruo del Comunismo si no hubiese existido su contrario, el monstruo del Capitalismo.

La existencia del Capitalismo implicó en la distancia el nacimiento del Comunismo como respuesta a la Violencia Global generada por  el Poder del Dinero y de la Banca. Nacimiento en la distancia sobrevenido a causa de haberse aliado en un cuerpo  homicida letal las dos corrientes anticristianas dominantes del pensamiento europeo moderno durante los siglos XVI, XVII y XVIII: El Protestantismo Calvinista en su forma de Anglicanismo Imperial, y el Ateísmo Científico en su forma de Materialismo Histórico.  Unidas estas fuerzas en un cuerpo de intereses hegemónicos supremacistas concibieron una Ideología, el Capitalismo, cuyo núcleo  recibió del Apóstol de la Muerte, Charles Darwin, su ley fundamental: La destrucción de los pueblos débiles es de trascendencia vital en aras de la supervivencia y dominio de las naciones más evolucionadas,  por Naturaleza dotadas de la fuerza suficiente y necesaria para alcanzar una estado de civilización superior.

Pero no importa hacia qué lado el pensamiento voltee el péndulo de la Historia, el Hecho Existencial a cuyos pies acaba el proceso intelectual de comprensión del Origen de la Patología Suicida Global del Género Humano, manifestada en guerras interminables  durante los miles de años pasados; más allá de los discursos ideológicos seudo científicos de las Izquierdas, y de las defensas seudo cristianas de las Derechas políticas modernas, el Hecho es que  ambos Monstruos, Comunismo y Capitalismo, surgieron a partir de la Negación de los reyes y sus imperios a crearle a sus pueblos y naciones un Estado fundado sobre las Leyes del Espíritu del Evangelio, cuyo Poder tuviera en la Fraternidad entre todos los hombres y naciones en Dios su Fuerza y Riqueza.

Establecido el origen de los reyes y sus imperios sobre la Necesidad de la Esclavitud y la Guerra, producto de la Caída del primogénito de los reyes de la Tierra, Adán, hijo de Dios, padre de Cristo, se entiende que para los intereses de los hijos de Caín la Ley Divina de la Fraternidad Universal fuese un muro contra el que lanzarse con todo el peso de  la muerte. Tentados por Satán, se arrodillaron a sus pies a cambio de la  corona.  No eran santos. No tuvieron la fuerza de Jesucristo. Entre ser un hombre a la imagen y semejanza de este Jesucristo o serlo a la de Satanás, eligieron  la segunda opción. Los efectos de la bendición de aquellas pasiones por el Poder y las Riquezas habiendo encontrado en  el Protestanglicanismo su fundamento teológico, de un sitio, y sus muros en el Ateísmo Científico,  del otro, la bendición del Evolucionismo Genocida Darwinista  le abrió al Siglo XX las puertas de la Batalla entre Gog y Magog. Batalla ya anunciada por quien vivió el Nacimiento y Extinción de Mundos durante su Vida en la Eternidad del Cosmos.

 ¿Qué nos queda ahora? Cada vez que abren la boca, sea comunista o capitalista su bandera, crece un palmo la ruina de las naciones. No se trata de caer en  discusiones entre sordos, que nacen muertas. Ningún Mundo en la Historia de la Eternidad sobrevivió al efecto de su alimentación por la Ciencia del Bien y del Mal. Dios vivió esta Verdad miles de veces.  La Ley es inexorable. Todo Mundo abandonado a sus propias fuerzas en su lucha por la Supervivencia contra la Muerte, que sus propios hechos generan, todos, sin excepción, cayeron en el polvo del Olvido, desaparecieron de la faz de la Eternidad, regresaron al polvo del que surgieron. El cómo no importa. Cuando el soldado cae por metralla, por sable, por bomba o por quijada de asno, el cómo no es trascendental, su muerte sí lo es.

Los reyes, cuerpos de un Mal que los domina y hace vivir en ellos una ambición sin límites por las Riquezas, sobre cuya posesión basan y fundan su Poder, fueron los creadores de las guerras civiles, internacionales y mundiales que asolaron la Historia y nos han conducido al corazón de las tinieblas  que al día de hoy  arrastra a las naciones al abismo de la destrucción de toda vida en la Tierra.

Pero por en cuanto nuestro Creador Divino vio este Fin desde el mismo día que un hijo suyo  se abrazó a la Ley de la destrucción de nuestro Mundo,  amando su Creación nos legó un Testamento por el que la Descendencia de su Hijo se levanta para conducir la Historia fuera de las Tinieblas y lejos del Precipicio en el que, por lógica, abandonado el ser humano a sus solas fuerzas, se debiera hundir para siempre en el abismo de su extinción, como ya se hundieron en ese mismo Abismo  Mundos sin número, antes de conocer el Cosmos a su Nuevo Señor y Dios.  

Las Interpretaciones de la Relación del Libro Divino con la Historia de los siglos se ha realizado siempre desde el Desconocimiento de la Relación del Creador del Nuevo Cosmos con la Vida. El Creador es el Padre de la Vida. “Yo soy la Vida” dice su Hijo. “He aquí mi Hijo Amado” escribe Dios. Este Hijo se hace Hombre y toma  por Pueblo suyo al Género Humano. Inexorable el Destino hacia el que caminaba el Hombre, consecuencia des la Caída en el agujero negro de la Ciencia del bien y del mal, por Amor a su Hijo, y porque asumió ser la Cabeza de la Iglesia, su Cuerpo es bendecido con una Promesa de Liberación de ese Destino, que ÉL compró con su Sangre para ser recogido en su Testamento y llevado a su Descendencia, quienes, a la manera que Cristo vivió en Eva, éstos vivían en su Esposa, la Santa Madre Iglesia Católica.

La Batalla Final estaba servida desde el momento en que el Nuevo Testamento fue firmado y entregado al Espíritu Santo, que vive en la Iglesia, hasta que la Creación entera fuese liberada de la expectación angustiosa que habría de sufrir el Mundo hasta el Nacimiento del Primogénito del Testador.

Los siglos han pasado, los milenios han hecho su trabajo. Las fuerzas que debían arrastrar al género human a su extinción  surgieron y cumplieron con la naturaleza homicida, su impronta existencial lógica. La cuestión ahora regresa al principio: Si el Comunismo se basa en la creación de un Estado con el que se relaciona el pueblo de esclavo a amo, y el Capitalismo es la creación de un Estado Militar al servicio de  unas élites dinásticas cuyas coronas son Bancos y sus Industrias son las de la Guerra,  la  verdad, mas allá de las discusiones bizantinas,  es que ambos sistemas tienen una misma raíz, el Fratricidio.

Caín mató a Abel por muchas razones, pero se entiende que de no controlar la producción de alimentos y el acceso a ellas su vocación de restauración de la corona perdida por su padre no hubiese  podido realizarse. La corona que bajó del Cielo y se perdió en el Infierno únicamente podía hacer su regreso a la Casa de Adán asentando su trono sobre la sangre y el fuego de la muerte de todos quienes se opusiesen a su  destino. ¡Quien mató a su hermano qué no estaría dispuesto a sacrificar en aras de su gloria!

Este es el origen de todos los reyes del mundo y de todos los Estados de la Tierra. Origen que vino a combatir el hijo del Hombre y que hubo de aparcar en aras de la Necesidad de su Muerte. Muerte en absoluto en vano; ni para el Cielo ni para la Tierra. La Fuerza de Aquel Niño que entró en el Templo para unir a todos los pueblos y liberarlos del Imperio de la Muerte, creando un Reino en la Tierra cuya Historia Futura se vería, para siempre, libre de la Ley de la Ciencia del bien y del Mal, ese Futuro  fue firmado con Su sangre, y sellado en Su Testamento hasta el Día de la Gloria de la Libertad de los hijos de Dios, Su Descendencia en el Espíritu de YAVÉ: de sabiduría e inteligencia, de entendimiento y fortaleza, de consejo y Temor de Dios.

Dar Fin a un Poder que tiene en la Muerte su gloria, dar Principio a otro Poder que tiene en la Fraternidad en Dios su piedra madre, es el Reto de esta Generación de hijos de Dios del Siglo XXI: y hacerlo sin necesidad de invocar a la Guerra.

El Comunismo  tuvo de bueno que liberó al hombre de la esclavitud; el Capitalismo, lo trasformó en una persona creadora. Pero ambos llevan un Mal dentro, el Comunismo libera al pueblo para hacerlo esclavo del libertador, el Capitalismo pone la libertad del hombre creador al servicio de la Guerra de defensa de los intereses de las familias dinásticas que lo gobiernan. Al final ambos pueblos son esclavos del Poder que buscando  la Libertad crearon.

Ambos tienen en común que necesitan  culpar de sus males interno a un agente externo. El Comunismo acusa al Capitalismo para defender su derrota hacia la Tiranía Absoluta de un Estado Todopoderoso. El Capitalismo justifica la inversión de toda la riqueza del Estado en  una Industria Militar Todopoderosa en base al mismo destello de la clásica locura y demencia:  el enemigo está fuera, es el Comunismo.

La misma vieja historia desde Caín a Hitler y Stalin. O como diría el sabio: “Nada nuevo bajo el sol”. Del discurso del uno y del otro, de sus guerras frías y calientes únicamente se escandalizan los tontos. Ambos tienen un mismo origen : El Oro es la fuente de Poder del Estado. Mientras más rico, más poderoso. Siendo el Oro la gloria de un Estado, la Guerra es legítima cuando se trata de mantener ese Poder y de mantener el Odio hacia ese agente externo, causa principalísima de todos los males que crea el propio Estado.

Liberar el acceso de todos los hombres a los medios  naturales inherentes a la dignidad de un hijo de Dios es una Necesidad Vital Histórica. Un Muro de miles de años se opone a esta Liberación. Desde el momento que el valor de los recursos naturales viene dado por Poderes cuya naturaleza es Cainita, hay Guerra. La Ley Natural y la Ley Divina fueron los dos pilares sobre las que se estableció la Civilización. Prohibir y condicionar el acceso a los recursos que la Naturaleza y Dios ponen al servicio de todos los pueblos de su Creación es un Delito contra la Vida.

En efecto, si se quiere sanar un cuerpo primero debe conocerse la naturaleza de la enfermedad que le afecta y lo arrastra a la muerte.

 

28/11

 

¿De donde sale la maldad, en qué estratos de la mente se incuba la gente mala, qué le hace creer a uno que  haciéndole daño a otro es más grande, en qué celda de su conciencia parió un  hombre la idea de  medir  la fortaleza por la fuerza del imperio que extiende a su alrededor, qué le lleva a creer a unos que su gloria está en la miseria de los demás? No hay respuesta. Quienes se aman a sí mismos sobre todas las cosas no se hacen ninguna pregunta. El miserable nace para vivir en la miseria, es su karma, su predestinación, ser un miserable; el  poderoso viene a este mundo para ser un dios, la fidelidad a su destino es  el principio de la manifestación de su superioridad genética. Hombre o mujer, macho o hembra, es lo que hay, y ay de aquellos que renieguen de su  gloria y destino; serás un traidor a tu naturaleza.

¿Entender la psicología de un discípulo de Satán? ¿Qué es la muerte, qué es la vida? Treinta monedas de plata,  un plato de lentejas, mi reino por un caballo, una puerta de salida, túneles al infierno, la garganta del la mentira es profunda como la fosa de las Marianas y poderosa como la cordillera de los Himalayas, ¡quién se atreverá  a cerrar el abismo del desprecio al quien se planta en su camino, o ponerle cerrojos al infierno en el que quiere asentar los cimientos de su  paraíso!. Eres Historia, eres el Estado, eres la Nación, eres el Mundo, eres un dios. Todos de rodillas, a morir con las botas puestas.

Nacer en la Tierra no es una maravilla, es una tragedia. Bajo los pies de las naciones un océano de sangre alimenta el caldo de cultivo para células de fin del mundo. No hay belleza en la Memoria, el Pasado del habitante de la Tierra es un rosario de guerras, el Presente hereda el fuego por su legado, el Futuro es un cuento de viejas, siempre la misma leyenda, un Atlántida que se hundió en las aguas,  docenas de imperios que se ahogaron  los mares de sangre que ellos mismos llenaron.

¿Dónde está el sabio que vea concierto, armonía, equilibrio, en el escenario de las naciones? La riqueza es lo que vale; el Poder, lo que cuenta. Quien cree en el poder del hombre es  el peor enemigo de su casa. ¿Qué han hecho los hombres durante miles de años en el Poder? Todos criminales, todos asesinos, todos a la izquierda, terroristas, pederastas, proxenetas, drogadictos, prostitutas de la peor especie, monstruos amamantados por las ubres del Poder.

Yo, sólo yo y nadie más que yo, el evangelio de los nuevos dioses. Ave César, los que van a morir te saludan…

Pero corre, César, porque  antes de morir devoraremos tu gloria, tu fuerza, tu orgullo y tu casa.

Sí, lo he oído de mi Dios, “no morirán mis hijos como su Padre”.

La Cruz fue. Hoy es la Cara.

Bendito sea Dios

 

 

27-11

 

Nunca se dirá lo suficiente ni se puede dejar de decir menos, no vivimos hacia atrás, la cuenta de la vida no corre boca abajo, al abismo; vivimos hacia adelante, hacemos el camino a la gloria, contando cada paso como un días más, que nos acerca a la cima de la vida eterna

Son muchas las lagunas que hemos heredado del Pasado, agujeros negros en la Memoria de nuestra Historia, en los que caemos sin querer pero sabiendo que existen. La Guerra no se combare preparándose para la Matanza, la Paz se construye creándole a la Paz un Cuerpo Invencible. Somos Creación de Dios, Ciudadanos del Reino de su Hijo, la pregunta pide paso: Antes nosotros, por nuestro drama, habiendo estado sujeto nuestro Mundo a Guerra Civil Universal, ¿debía Dios renunciar a su Deber de construirle a la Paz un Cuerpo Invencible dotado de su Topododer y Sabiduría?

Hemos estado equivocados, de siempre. La Guerra no se combate ni se destierra del Género Humano preparándose para la Guerra. Lo estamos viviendo en vivo y en directo. El Oso Bicéfalo del Norte siguió este política y hoy se encuentra al borde del abismo. Como el arte reclama al artista, las armas piden campo de batalla. Es a la Paz a la que debemos entregarle nuestra fuerza, nuestra inteligencia, alma y espíritu.

La Historia nos pone sobre la mesa su libro, la Sabiduría nos guía a través de sus capítulos. La Corrupción es la madre de la Guerra. La Bestia del Norte se hundió en la corrupción hasta el cuello y la única forma que encontró de salir fue lanzándose a la Guerra Fratricida.

La lección es genuina, mil veces repetida por todos los rincones de la Tierra. El Corrupto cree que extendiendo la tela de araña de su corrupción burlará la Guerra Civil. Su demencia es preludio de Matanza. La Corrupción se combate dándole a la Justicia todo el Poder y la Libertad natural y necesaria para perseguir al corrupto, combatir su organización política criminal y hacer desaparecer del cuerpo de la nación ese  virus maligno.

El Deber de levantarse contra la Corrupción y su cuerpo político es Vital. Un hombre que vive bajo las botas de una organización criminal que se ha dado un cuerpo político para instaurar la dictadura de su egolatría, esclavizando a toda una nación a la salud de su pasión sin limites por la Riqueza y el Poder, ese hombre que agacha la cabeza y se somete a la impotencia no es un hombre, es un despojo humano.

No hay duda de cuál es la naturaleza de la Ideología que desde la Organización Criminal más grande jamás inventada, la ONU, extiende su Maldad sin límites sobre todas las naciones, buscando eliminar al Hombre creado por Dios a la imagen y semejanza de sus hijos, un hombre que prefiere morir antes que vivir bajo las botas de la Tiranía.

El Hombre a la Imagen y Semejanza de los hijos de Dios, cuyo Modelo es Cristo Jesús, es el Enemigo público número uno de esa Ideología global que extiende su corrupción absoluta en la creencia de poder controlar su efecto lógico y natural : la Guerra.  ¿Dónde están las Fuerzas de Pacificación de aquella Organización que nació para darle un cuerpo internacional a la Paz? Se ha corrompido hasta  hacer bueno el dicho : Nació Adolfito y devino Hitler.  Esta ley es la que ha seguido esa ONU que adoptó la Doctrina Genocida de la Bestia del Norte. ¿Dónde están esos ejércitos de la Paz en el conflicto Israel-Palestina? Justamente donde estaban cuando  el Caín Ruso se levantó contra el Abel Ucraniano, repartiendo beneficios con las industrias armamentísticas.   

No es este el camino a la Paz. No lo ha sido. No lo fue nunca. Armarse  fue de siempre preludio de Guerra,  civil, internacional y mundial. La ley de la Historia no miente. Y aunque  las organizaciones políticas criminales dependientes de la Organización Genocida  más grande jamás concebida lo niegue: La Corrupción conduce inexorablemente a la Guerra. La única forma de impedir este efecto es combatiendo la causa,  levantarse contra el Gobierno de la corrupción, darle a la Justicia todo el Poder para abrir las puertas de los tribunales, citar a los miembros de ese cuerpo que creen poder evitar el efecto indeseable que cultivan, en la creencia de  estar blindados contra su ruina, hacer que  la responsabilidad sobre sus actos llueva sobre sus cabezas  pena y castigo. 

¿No es la Historia de nuestro Mundo, arrojado a luchar por su vida en un campo de batalla perpetuo, suficiente  lección? Quieren meter sus manos en esta Lección negando que la Corrupción es la madre de la Guerra Civil, Internacional y Mundial.  Nosotros hemos sido creados a la imagen y semejanza de los hijos de Dios; es el problema que tienen quienes adoran al dios de la corrupción y doblan sus rodillas creyendo que blindándose contra  sus delitos, haciendo de los Congresos una Cueva de Ladrones, inmunes contra las leyes, que ellos crean para  defenderse de la Justicia, llamando a los jueces a responder del acto delictivo que es llamar a tribunal y llevar a la cárcel a un político… es el problema que tienen, nosotros, creados a imagen y semejanza de los hijos de Dios. He aquí porqué nos combaten desde la ONU, desde los Gobiernos Títeres de las Izquierdas aliadas en esa Alianza de Civilizaciones cuya victoria mira a la desaparición del Cristianismo de la faz de la Historia.

Lo dicho está escrito. Los próximos seréis vosotros.

Esa profecía ya ha comenzado por la Europa de las Izquierdas del Norte. La Batalla Israel-Palestina no es una guerra  de estados, es la guerra clásica del Islam contra la Democracia Moderna, es el regreso de  las naciones musulmanas a la Teocracia Dictatorial natural a la ley coránica, la nostalgia de un pueblo que no puede, ni sabe, ni acepta vivir con los demás pueblos a la luz de la ley de los Derechos humanos y divinos del Hombre. Esa guerra ya ha comenzado por el Norte Europeo Occidental y las Izquierdas Títeres al servicio del Islam, el nuevo amo de la ONU, les siguen abriendo las puertas, cada año irrumpiendo por sus fronteras cientos de miles de musulmanes que, huyendo de sus regímenes, acaban por querer implantar en las naciones que les abrieron los brazos el régimen del que huyeron.

 Los efectos se combaten  mirando a las causas, apagando el fuego que llevan dentro. No se combate una enfermedad alimentando el virus mediante una política de convivencia entre salud y enfermedad; la salud y la enfermedad en convivencia significa la muerte del cuerpo.

Ya lo sabemos, las Farmacéuticas han  impuesto un modelo de convivencia entre  salud y enfermedad en aras del crecimiento de su riqueza, con las que compran a gobiernos necesitados de Poder para hacer crecer la ley de su imperio. Creímos una vez que  la naturaleza de la ciencia de la Vida nacía con vocación de victoria invencible contra la enfermedad. Hoy sabemos que se ha aliado con la Enfermedad, ha hecho suya la política de Guerra contra el ser humano y vive a costa de la enfermedad, desterrando de su vocación su ideario original

Cada hombre debe  mirarse en el espejo del Tiempo,  ver su propio rostro, verle el rostro al mundo en el que ha nacido y vive, y decidir de qué lado está, si de la Verdad, madre de la Justicia, y raíz de la Paz, o de la Corrupción Global alimentada por la ONU Mediante una Ideología que pretende desterrar del Hombre al hombre creado a la imagen y semejanza de los hijos de Dios.

Dicen los ignorantes que someternos a la Ideología que  pide nuestra muerte es raíz de progreso y civilización. Miramos a la Historia Universal y observamos todo lo contrario, que el encumbramiento de organizaciones políticas a una posición fuera del alcance de la Justicia fue el principio de la destrucción de las naciones, reinos, sociedades y civilizaciones que  creyeron en el destino  de unos pocos, enloquecidos por la visión de las riquezas que trae el Poder.  Esta ley ha estado operando miles de años.

Comenzó su andadura aquel día en que una mujer engañó a su hombre, manipulando el amor que le tenía,  para ofrecerle la fruta envenenada de la gloria de quien es igual a un dios, creador de leyes, señor de la corrupción absoluta, amo de todos los ciudadanos de su pueblo, sobre quienes establece mediante decreto el poder de su demencia. La Mentira es su pan de cada día. No reconoce más sonido que el del oro. Es discípulo de aquel Satán que le quiso imponer al mismísimo Creador del Cosmos, Señor del Infinito y de la Eternidad,  el imperio de su voluntad.

El Hombre vive a la Luz de la Verdad, tiene en la Justicia la Garantía Invencible su existencia y felicidad. Justamente todo lo contrario del dictador que usa el Poder para levantarle a su gloria el monumento de su tiranía. Antes la muerte que vivir bajo las botas de semejante hijo bastardo de Caín.

La Corrupción conduce a la Guerra Civil, es ley invencible. Su propia existencia es una declaración de guerra; las huestes de  semejante tiranía deben ser detenidas, llevadas a los tribunales para responder de delito de  sedición, rebelión y traición a la Paz entre los pueblos.

Observamos en nuestros días cómo se han blindado en el Sur, contra  la Justicia, en razón de creer que el pueblo es cobarde y no se levantará contra los lobos con piel de oveja que han asaltado su Democracia, e incluso se han dado un brazo armado con el que  están dispuestos a  cortar cabezas.  La Lección de la Historia no le ha servido a esa organización criminal para comprender que cuando ese Pueblo, al que quieren esclavizar a su ley de corrupción, se levanta, tiemblan los cimientos de la tierra. A su Organización, se le cortará el brazo, se arrojará al fuego, y no se levantará el ancla del barco del que querrán huir las ratas. ¿Dónde irán, en que parte del Globo se esconderán cuando el Brazo de la Justicia extienda su  Jurisdicción a la Plenitud de las naciones?

Este no es día de tinieblas, sino de luz. Nuestro Mundo no caerá en el abismo de los desastres apocalípticos con el que bombardean a las naciones. Este es día de Batalla Final entre la Justicia y la Corrupción, la Verdad y la Mentira. La Ciencia doblará sus rodillas ante la Fe. Las Universidades bajarán sus brazos ante la Iglesia. Las naciones se levantarán contra las organizaciones criminales que han hecho de la ONU su Templo, Palacio y Castillo, desde cuyos muros bendicen las guerras en pro de la Nueva Doctrina de NO Intervención en las Guerras de Genocidios… por ser cuestión interna de Estados, y extienden el Odio hacia el hombre engendrado a la Imagen y Semejanza de los hijos de Dios.

Somos Cristianos, Ciudadanos de  una Civilización fundada por Dios sobre la Roca de una Verdad Universal y Eterna: La Guerra se combate desde la raíz levantándole a la Paz un Cuerpo con Jurisdicción Universal en el que participan todas las naciones, sin reservas, ni obediencia a ningún gobierno individual a la búsqueda de mantener la NO Intervención como garantía de su existencia.

El Hombre  no reconoce más rey que a su Rey, Jesucristo, Dios Hijo Unigénito, nuestro Creador, quien con su Todopoderosa Palabra creó la Luz, el Firmamento y toda vida que existe y ha existido sore la faz de la Tierra, y nos llamó a su Imagen y Semejanza a compartir su vida, y Vida eterna, y nos volvió a llamar con la Voz de quien desde una Cruz nos pidió que creamos en su Verdad, que no le tengamos miedo a Dios, su Padre, porque quien lo estaba viendo a Él estaba viendo a su Dios: Dos Personas, un único Espíritu.

Pan y Fuego en un Todo Divino, excelso, maravilloso, magnífico. Si el Hijo de Dios se lo daba todo a quien se lo pedía, y por  esa Naturaleza Invencible suya a decir SÍ conquistó el corazón de todos, ¡cuánto mas debe el Hombre amar a su Padre, que nos dio a su Hijo Amado, que es Su Vida!

Y quiere la Ciencia y sus amos  políticos hacernos creer que aquella Voz que desde la Cruz nos llamó una vez más a su Imagen y Semejanza es una Neurosis de la que debemos liberarnos… para ser conducidos a las guerras mundiales, al matadero de la guerra final, con la alegría de los rebaños que se creen conducidos a la Utopía, para encontrarse finalmente al borde del precipicio, empujados al abismo por una fuerza de la que nadie puede triunfar.

Por esto talan la inteligencia de las generaciones reduciendo su visión a una pantalla móvil en la que ellos dibujan horizontes habitados por monstruos y demonios; entre esas criaturas de ficción y ellos la elección es simple: más vale  lo malo conocido que lo peor por conocer. De esta manera los mismos que  crean monstruos en el horizonte son los que  vienen corriendo a salvarnos. La cuestión es, ¿y quién nos salvará de los creadores de esos monstruos ficticios que únicamente existen en la necesidad que tienen de mantener el status quo de dioses en el que se han instalado?

Cada día es un paso más que nos avanza al encuentro con nuestro Creador.  El conflicto de la Muerte lo alimentan quienes  tienen en la Política del Miedo la garantía de su statu quo divino. ¿No fue este el sueño de aquellos Rebeldes que quisieron destronar la Ley de Dios para alzarse ellos como dioses gobernando un Olimpo de Dictadores en cuyas manos debía reposar la Guerra y la Paz? Desde entonces aquel sueño se apoderó de reyes, emperadores, y por fin ha hecho de las organizaciones políticas actuales  el cuerpo que duerme, en cuyas mentes ellos son dioses, todos y cada uno de ellos más allá del bien y del mal.

LA BIBLIA DEL SIGLO XXI

LA HISTORIA DIVINA DE JESUCRISTO

 

ue se merece carcel hasta la muerfte.

 

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